La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural distribuye entre los productores locales la “Gui?a pra?ctica para la prevencio?n y mitigacio?n del COVID-19 en la agricultura”.
En el listado de actividades contempladas para el retorno a la “nueva normalidad” emitido por el Gobierno del Estado figuran la explotación de ganado bovino, caprino, avícola, servicios relacionados con la cría y explotación de animales y aprovechamiento forestal, entre otros.
Esta publicación fue auspiciada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y destaca que el suministro de alimentos debe ser considerado como una actividad esencial, toda vez que de ella provienen los alimentos para la población; por lo tanto también se debe asegurar la sanidad de aquellos que se desempeñan en él, así como la de sus familias.
En ese rubro encajan las actividades agrícolas mencionadas.
La guía se dirige a empleadores o sus representantes a cargo de las explotaciones agrícolas, responsables de preservar la seguridad y salud de los trabajadores; jornaleros agrícolas ya sean permanentes o temporales, y migrantes.
El documento también contempla cualquier tipo de explotación agrícola: grandes, medianas y pequeñas, cooperativas y explotaciones familiares.
Entre las medidas de seguridad figuran realizar evaluaciones del riesgo a través del análisis de los diferentes ambientes de trabajo y de las actividades realizadas por los trabajadores, de tal forma que se puedan jerarquizar las áreas prioritarias, los puestos y ambientes de trabajo. Además de otras áreas potenciales donde exista interacción con otros trabajadores, proveedores, clientes y visitantes, entre otros.
Distribuir al personal acorde con la distancia mínima establecida de separación de 1.0 a 2.0 metros (según la legislación de cada país). No permitir más de cinco trabajadores en un mismo puesto de trabajo.
Se precisa que, en casos en los que sea necesario trabajar a una distancia menor a un metro, se deberán usar mascarillas.
Otras medidas de observancia son el establecimiento de grupos de trabajo para minimizar el movimiento de trabajadores en las áreas laborales, para facilitar la trazabilidad y control, en caso de que se identifique algún posible contagio; evitar la rotación de labores o puestos en la unidad productiva; definir horarios escalonados por cuadrillas o grupos para trabajos, en áreas donde existan diferentes puestos y operaciones que requieran mayor mano de obra, así como, en las áreas de servicios: comedores, sanitarios y vestidores, para evitar aglomeraciones.
La administración de la unidad de producción debe asegurar que las personas se sienten con un espacio de separación de 1.0 a 2.0 metros durante los tiempos de comida (se pueden marcar los espacios para visualizarlo mejor).
Los trabajadores de las unidades agrícolas no deben compartir alimentos ni utensilios de comida.
Los patrones deben informar a los trabajadores sobre su derecho a alejarse de una situación de trabajo o interrumpirla cuando esta implique un peligro inminente y grave a la vida y salud, de acuerdo con los lineamientos de la legislación nacional (derecho a saber). Establecer procedimientos e informar inmediatamente a su supervisor directo de la situación.
Los patrones deben informar a los trabajadores, a través de un lenguaje sencillo, sobre los riesgos derivados del COVID-19.
Capacitación
En el manual se contemplan charlas informativas a todos los trabajadores de forma periódica sobre la situación y avances de la pandemia, tomando en cuenta el distanciamiento social, y emplear medios impresos de fácil comprensión por los trabajadores.
La gerencia se debe capacitar y reproducir a los trabajadores y sus representantes las medidas adoptadas para la prevención del riesgo de exposición al virus y en cómo actuar en caso de infección por COVID-19. Para los trabajadores de alto riesgo, la capacitación debería incluir el uso correcto, mantenimiento y desecho del equipo de protección personal (EPP).
En caso de que algún trabajador dé positivo a COVID 19 se debe aplicar el protocolo establecido por la autoridad de salud, para facilitar el acceso a estructuras y cuidados sanitarios en caso de que un productor o trabajador haya contraído el COVID-19.
Controles de acceso
La guía contempla también una serie de controles de acceso a las unidades agrícolas para evitar la propagación del COVID 19. Por ejemplo, organizar la entrada y salida de los trabajadores a la unidad de producción, evitar aglomeraciones, marcar la distancia en el suelo y evitar el paso en los dos sentidos.
Los productores deben facilitar el lavado de manos antes de ingresar y al salir; establecer un filtro de detección de síntomas para los trabajadores y sus familias, el control de la temperatura corporal que no sea mayor a 37.3 °C y asegurarse de que no presente otra sintomatología como tos seca, estornudos, malestar general, dolor de cabeza y/o dificultad para respirar.
Los productores deben desinfectar todo el instrumental o equipo empleado; evitar la visita de trabajadores o personal externo, si es necesario su ingreso, aplicar las mismas medidas de control de acceso.
En caso de nuevas contrataciones, aplicar las mismas medidas de control de acceso, considerando los principios de respeto y no discriminación.
Se debe promover los cambios de vestimenta al entrar y salir de las unidades agrícolas, se debe contar con vestidores para hombres y mujeres, con áreas limpias, realizar mantenimientos, la limpieza y las buenas condiciones de uso de los equipos de protección personal.
En los vestidores o baños se debe evitar más de cinco trabajadores y establecer turnos de entrada y salida en los vestidores y evitar el paso en los dos sentidos.
Higiene personal
En cuanto a la higiene personal, los patrones deben insistir en el lavado correcto y constante de las manos con agua y jabón con una limpieza de por lo menos 20 segundos, usar, como refuerzo gel antibacterial o soluciones de alcohol al 70%. Repetir el lavado de manos después de toser, estornudar o sonarse la nariz y, antes y después de comer y de ir al baño, para evitar la transmisión o el contacto con el virus.
En cuanto a los desechos generados por el personal, cofias, cubre-bocas, guantes, pañuelos, servilletas, papel higiénico entre otros se deben embolsar y sellar con un nudo.
La empresa o unidad debe reforzar la limpieza y desinfección de áreas comunes: salas, recepción, lugares de reunión, áreas de trabajo cerradas, talleres, almacenes, semilleros, invernaderos, así como los vestidores de mujeres y hombres, guarderías, albergues; sin olvidar los pasamanos, perillas, interruptores de luz, puertas y escaleras. Para esta operación de limpieza y desinfección emplear soluciones de cloro.
Se deben realizar labores de desinfección de las herramientas manuales, equipos electro-mecánicos y otros de uso permanente, después de cada uso, así como las unidades de transporte mediante procesos de aspersión con mezclas de alcohol etílico al 70% o bien con soluciones de cloro.
En vista que algunas empresas cuentan con transporte de personal, deben limpiar todos los días las unidades de transportación de los trabajadores, si este es proporcionado por la explotación agrícola, como se señala en los procedimientos de limpieza de superficies potencialmente contaminadas.
Establecer la distancia social de seguridad y colocar información relacionada con las medidas preventivas a seguir y acordar y coordinar con el conductor el uso de guantes, el lavado de las manos con frecuencia durante la jornada laboral, y antes y después del uso de guantes.
Cuando algún trabajador presente síntomas de COVID 19 se debe avisar al supervisor o encargado que no está en condiciones de trabajar y contemplar la cuarentena obligatoria y proceder con la sanitización del lugar de trabajo y la vigilancia de la salud de los trabajadores que tuvieron contacto.
(José Manrique)