Aumenta el número de personas que no respetan las áreas cerradas de los parques, se observan tranquila y plácidamente cruzando en ellos o sentados en sus bancas, pese a que están acordonadas, incluso algunos retiran las cintas rompiéndolas para poder hacer uso de ellas.
La falta de conciencia e irresponsabilidad de numerosos habitantes se pone de manifiesto sin preocuparse por cuidarse para que a la vez garanticen la salud de las familias.
Las autoridades municipales establecieron que está prohibido que la gente se concentre en dichos espacios recreativos para evitar la proliferación de contagios de coronavirus.
Se recordará que se ha procedido a colocar de manera más tupida el acordonamiento de las bancas del parque principal para evitar que gente inconsciente se siente en ellas, ya que aunque parezca increíble algunas personas se sentaban en los espacios de las bancas que no tenían cintas, sin embargo ahora las rompen y hacen uso de ellas.
Pese a que también la policía vigila estos sitios cuando no están cerca las personas simplemente continúan acudiendo a platicar o entretenerse en esto espacios públicos, sin tomar en cuenta que pueden contribuir al riesgo de aumentar las cadenas de contacto.
La desobediencia la realizan sobre todo personas de la tercera edad, por lo que los habitantes piden que las autoridades ejerzan mano dura en contra de ellos, ya que no es posible que pongan en riesgo la salud de los tizimileños y no respeten que estos sitios estén cerrados al acceso al público como medida de prevención sanitaria.
Por Luis Manuel Pech Sánchez