Yucatán

“La Casa del Concreto”, ubicada en el puerto de Progreso, no sólo se limita a fabricar bateas y comederos, ahora han innovado con elegantes jarrones, mesas y demás artesanías

Con un toque elegante para interiores y exteriores, maceteros, jarrones, mesas redondas de granito, bateas con el mismo acabado, pilas y piletas son fabricadas de manera artesanal por Luis Enrique Mena Herrera en su pequeño taller denominado“La Casa del Concreto”.

“La fábrica San Luis es un pequeño taller lleno de historia y tradición, pues hace 50 años mi papá Isidro Mena Loría fue quien inició este negocio. Vivíamos en la calle 51 número 351 alado de Proveedora Vidal, entonces andaba de conserje en el Instituto Tecnológico de Tizimín. Al jubilarme y fallecer mi padre y mi madre me encargue de la fábrica”, señaló Mena Herrera.

 

Añadió “ahora le estoy dando un giro innovador, pues no sólo se fabrican comederos y bateas, ahora me enfoqué con la imaginación de mi hijo José Gabriel, una de las personas que me apoya y empecé a hacer pura artesanía, porque aquí en Tizimín no tenemos artesanía elaborada con concreto”.

Indicó que poco a poco fue innovando, “ahora hago mesas, bancas, jarrones, maceteros en diferentes acabados y flamencos. Ahora con la pandemia innovamos con nuevos modelos de manera que puedan lucir elegantes, tanto en el interior como en el exterior de las viviendas”.

Señaló que su negocio tiene un buen futuro a través de las redes sociales, pues gracias a ellas se ha facilitado el darse a conocer. “Es trabajo manual, no hay maquinaria, todos se hace manera artesanal, estamos motivados para darnos a conocer y convertir el taller en una pequeña empresa; es un negocio familiar, mi hijo sube fotos, tengo en mente nuevas creaciones mi meta es hacer algo innovador diariamente y usar los materiales que hay en nuestro alcance y también fomentar el reciclado”.

La Casa del Concreto, fábrica San Luis, se ubica en la calle 82 entre 43 y 45 de la colonia Aviación a unos metros del Polifuncional.

Efraín Valencia