Tres adolescentes, dos de 15 años y otro de 16, se desvanecieron ayer momentos después de recibir su antígeno contra el COVID-19.
En la jornada de inmunización que se llevó a cabo en los domos de la exestación de ferrocarriles, la población de 15 a 17 años de edad se dio cita en buen número para que se les sea aplicado este antígeno contra el coronavirus.
Sin embargo, entre los jóvenes las bromas y/o señales de nerviosismo antes de pasar para que les sea aplicado el antígeno contra el coronavirus eran notorias.
La jornada dio inicio a las 8:00 horas, cuando el personal de salud ya se encontraba listo para dar inicio con la aplicación de la primera dosis del biológico. Fue a las 12:30 horas cuando los solicitantes que acudieron pasaron a sus asientos en espera de algún efecto luego de la vacunación.
Varios se sentaron para esperar que pasen los 30 minutos reglamentarios para estar en observación, cuando de repente escucharon un fuerte ruido que provenía de atrás de la zona de espera, al voltear se percataron de que C.M., de 15 años de edad, se había desvanecido.
Entre gritos de auxilio y desesperación, varios muchachos procuraron que el menor que cayó al piso fuera atendido. Asimismo, una joven de 15 años y uno de 16 años se desmayaron en sus respectivos asientos.
Para que los menores recibieran atención especializada llegó a la sede de vacunación la ambulancia de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), a cargo del paramédico Pedro Yupit.
Inmediatamente ubicaron a los afectados en una zona donde hubiera menos afluencia de personas y mayor circulación de aire fresco. Se les tomaron los signos vitales y determinaron que se les había bajado la presión.
Entre las labores de los paramédicos para que los menores se estabilizaran se detuvo la jornada de vacunación debido a este incidente. En el lugar de los hechos se encontraba la madre de C.M., que llamaba a su hijo por su nombre para que recuperara el conocimiento.
Minutos después éste fue reaccionando, por lo que los paramédicos procedieron a llevarlo al Centro de Salud de la localidad para que recibiera atención médica y asegurarse de que no haya tenido alguna lesión por la caída.
Los agentes de la Secretaría de Seguridad Pública permanecieron en el recinto ante los casos reportados. Minutos después se continuó la jornada de vacunación, donde algunos interesados, al ver lo que ocurrió, empezaron a bromear con desmayarse por temor a las agujas.
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CC