La actividad regresó al Malecón Tradicional de Progreso ayer viernes se contó con la asistencia de más de mil turistas, según datos de la Policía Municipal y la mayoría aprovechó los más de 40 grados que se registraron en la costa para darse un baño en el mar y hacer diversas actividades en la arena.
Los primeros visitantes acudieron desde las 06:00 horas; llamó la atención la llegada de un grupo de unos 20 ciclistas que se quedaron en la prolongación para realizar carreras y hacer ejercicio con los deportistas locales, en el área de calistenia.
A partir del mediodía, había por lo menos 500 personas realizando juegos o degustando platillos de alguno de los múltiples establecimientos del área, esto fue motivo para que arribaran varios vendedores ambulantes que durante la semana habían desistido de acudir al puerto para vender sus productos.
“Tenemos un grupo de Whatsapp en el que nos comunicamos constantemente, la semana pasada varios de nosotros decidimos no venir, es normal, la gente está asustada, piensa que se va a enfermar por todo lo que ven a través de la televisión. En este fin de semana esperamos que se tenga el doble de gente de la que se vio la semana pasada”, externó David Canché, dulcero que durante el cierre del malecón en las vacaciones pasadas se dedicó a trabajar en la panadería de su familia.
Agradecen Semáforo Amarillo
Lastimosamente, varios grupos de jóvenes que no dejaron pasar la oportunidad de tomarse la foto para el recuerdo y realizar videoclips a pocos metros del mar, omitieron el uso del cubrebocas y no respetaron la sana distancia.
“En otros Estados ya se está regresando a la normalidad, ¿Yucatán por qué no debería hacer lo mismo?, con tanta restricción sólo provocan que la gente se estrese más y vaya a lugares públicos en masa, en cambio con un cuidado que cada quien dirija en las playas o parques se tiene mejor controlada a la sociedad y no se genera más psicosis social que al final sólo origina querer salir a la calle”, aseguró la universitaria Sandy Meléndez, que llegó con un grupo de 15 jóvenes para pasar tres días en el puerto.
Esa opinión la compartió el matrimonio de Margarita Cen y Carlos Lara, también turistas locales que agradecieron tener sus dos vacunas y el Semáforo Amarillo en el Estado.
“El Gobierno hizo bien en pasar al color amarillo, mientras más reglas pongas es mayor las ganas de romperlas, es triste pero en nuestra cultura no se aprende hasta que se sufre. Nosotros únicamente venimos a comer y nos vamos, teníamos casi un año sin venir a la playa y eso que vivimos en Progreso, nos dimos una escapada como chamacos de secundaria, sin que nuestros hijos sepan”, expresó el ama de casa en medio de la risa.
Los extranjeros también fueron parte de la jornada, cuatro familias fueron vistas a mediodía degustando alimentos, ocupando una de las más de 300 sillas que fueron colocadas por los restauranteros.
También resaltó que las palapas y camastros ahora se rentaran en 200 pesos cuando hace apenas una semana estaban a disposición del público a la mitad de dicho precio.
“Es momento de repuntar, durante nueve meses, desde el primer cierre del malecón la pandemia nos ha maltratado mucho, con el semáforo amarillo declarado, esta tiene que ser una etapa de renacimiento para el sector turístico”, precisó Antonio Guzmán, progreseño que acudió a pasar un rato de sano esparcimiento.
Para salvaguardar la integridad de las familias locales y visitantes, se tuvo la presencia de cuatro patrullas en diferentes puntos del Malecón Tradicional e Internacional, también se avistó a agentes de la Policía Estatal y Municipal caminando entre la gente para exhortarlos a portar el cubrebocas.
JG