Visitantes, en su mayoría nacionales, arribaron al malecón del puerto desde las primeras horas de ayer, quienes aseguraron que aprovecharían los días previos al cierre de la playa por la contingencia, por lo que los prestadores de servicios aprovecharon la jornada para ganar un poco más.
Alrededor de 2 mil bañistas se dejaron ver en la costa yucateca disfrutando del Sol en compañía de amigos y familiares, los turistas indicaron estar aprovechando las vacaciones de verano de sus hijos, ya que probablemente regresen a clases presenciales, en agosto próximo, por lo que pasaron un rato de esparcimiento en Progreso, así como en playas aledañas.
Mónica Paredes, oriunda de Mérida, comentó: “lo ideal era venir sábado o domingo a pasar el rato con la familia pues los muchachos regresan a la escuela en agosto, pero por la restricción que pusieron de cerrar la playa y el malecón los fines de semana decidimos venir jueves y viernes a pasar unos días de relajación. Además, ahora es mucho más económico venir entre semana que visitar otros puertos el fin de semana. Mañana iremos a Chelem y ya el sábado nos regresamos a Mérida”, manifestó.
Los turistas indicaron esperar la noche con ansias para ver las atracciones del malecón, así como las zonas turísticas como las estatuas y la feria que se encuentra a un costado de dicho lugar.
“Nos han contado que está muy padre, y hemos visto fotos de lo brillante y colorido que se ve de noche el malecón, así venimos a tomar el Sol y en la noche regresaremos para ver qué más hay”, dijo Omar Conde.
Por su parte, los prestadores de servicios indicaron estar aprovechando que los turistas acuden entre semana a disfrutar de la playa, ya que durante el fin de semana la ganancia es prácticamente nula, a excepción de los grandes restaurantes de la zona.
“Ahora que iniciaron las vacaciones de julio y agosto y por la restricción en el acceso al malecón, la gente viene más entre semana, ya que sábado y domingo se van a la playas de Chuburná o Chelem que aún están abiertas para el público los fines de semana, así tratamos de aprovechar a los turistas que vienen pues la propina no nos cae nada mal, sobre todo que durante dos semanas no hubo nada de gente, y nosotros no ganábamos ni el mínimo, ahora ofrecemos nuestros servicios lo mejor que podemos para que nos tomen en cuenta”, dijo el mesero Gonzalo H.
Los comerciantes de la zona comentaron que las ventas han caído aproximadamente un 40 por ciento en comparación de hace tres semanas con el cierre de la playa, por lo que aprovechan hacer promociones para llamar la atención de los visitantes.
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Guadalupe Cab comentó que, “antes vendía bastante, sobre todo los cocos y los bolis por el calor que hace en la temporada de verano. Ahora, como nadie está viniendo, sólo logramos vender la mitad que antes y a veces ni eso, las personas ahora con la crisis traen sus refrescos y su comida, no pasan a comprarlos, tenemos que poner al 3x2 o una buena oferta para que nos compren, y así como yo hay muchos compañeros”, finalizó.
GH