El dinero enviado por los yucatecos residentes en Estados Unidos, que en el cuarto trimestre del año pasado alcanzaron un récord de un millón de dólares promedio por día, cerraron el año pasado con un monto equivalente al dinero que requiere la UADY para sostenerse tres años, al que necesita el Ayuntamiento para un año nueve meses y el que eroga el Gobierno del Estado durante casi dos meses.
Al respecto, el director general del Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya (Indemaya), Erik Villanueva Mukul, atribuyó este crecimiento, de 37 por ciento en comparación con el año pasado, a que mejoró la economía de Estados Unidos, pero también a que los yucatecos que viven en Estados Unidos, hasta 225 mil, no rompen sus lazos con su Estado natal.
Aclaró que, si bien la migración de paisanos – la mayoría de poblaciones del Sur del Estado- al vecino país del Norte, es constante, en realidad se da “por goteo”, ya que deciden hacerlo “por invitación” de algún familiar que ya se estableció.
De acuerdo con las estadísticas del Banco de México (Banxico), en el último trimestre de 2021 llegaron a Yucatán 95 millones 426 mil 607 dólares, la cifra más alta registra para cualquier periodo similar en la historia. Dividida esta cantidad entre los 91 días transcurridos entre octubre y diciembre del año pasado, el promedio diario es de 1.04 millones de dólares.
Este monto histórico de los últimos tres meses de 2021 impulsó también un récord anual: se recibieron 335 millones 113 mil 873 dólares, equivalentes a seis mil 930 millones 154 mil 893 pesos, al tipo de cambio del 5 de febrero de 2021 (20.68 pesos).
Comparado con los presupuestos 2022 de algunas Entidades públicas, las remesas superan 40 por ciento el del Ayuntamiento de Mérida; 319 por ciento el de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), y equivalen al 15 por ciento del presupuesto del Gobierno del Estado. En otras palabras, los yucatecos que viven en Estados Unidos podrían sostener 3 años a la Universidad, 1 años 9 meses a la Comuna meridana y casi 2 meses al Ejecutivo estatal.
Villanueva Mukul indicó que el brinco de 243 a 335 millones de dólares, entre 2020 y 2021, se debe sobre todo a la mejoría económica de Estados Unidos, a que los yucatecos migran, pero no rompen lazos familiares y a la mejor “bancarización”, que facilita el envío de dinero.“En general el entorno económico y social ha sido mejor que el del 2020 y a pesar de que no se termina aún la recuperación por la pandemia la cantidad de remesas puede estar en buenos números”.
Tal como revelan los números, los más de 335 millones de dólares -aclara el funcionario- pueden verse como un pequeño número, pero “es fundamental para la economía de algunas de las familias del Estado, pero también para las economías municipales, regionales e incluso para la economía estatal pues es una cifra que ya impacta”.
Los paisanos que viven en el vecino país del norte, 200 mil y 225 mil, principalmente en los estados del Pacífico, reciben salarios por vender su mano de obra en restaurantes o tiendas o como empleados domésticos, aunque también hay en labores agrícolas y de la construcción.
Indicó que aunque la migración de yucatecos es latente, pero no se da en forma masiva, sino “por goteo”, a invitación de los que ya están ahí, que por lo regular familiares o amigos de la comunidad. El éxodo no es como parte de las caravanas “que se van a la buena de Dios”.
Las poblaciones yucatecas con mayor número de migrantes son Mérida, Oxkutzcab, Ticul, Tekax, Peto, Muna y Santa Elena.
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JG