Con la bendición del ruedo taurino y la siembra del ceibo como símbolo sagrado da inicio la Fiesta Tradicional en honor al Santo Cristo de misericordia y San Francisco de Asís, en Hocabá, Yucatán.
Previo a la bendición del tablado, para los festejos paganos, el sacerdote Santos Ángel Villegas Gil, ofició una misa en la parroquia de San Francisco de Asís
El guía espiritual habló sobre la misericordia del señor, así como la resurrección de Jesús.
De igual manera, exhortó que estas actividades se lleve a cabo sin excesos, ahora que hay apertura para la diversión, se haga a conciencia, con los protocolos de salud para evitar que la letal enfermedad de la pandemia afecte a las personas.
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Inmediatamente, con el tronar de voladores y música de charanga, cargaron a las imágenes sagradas del señor de misericordia junto con "San Panchito", como de cariño los fieles suelen llamar; se dirigieron al foso taurino para la bendición del área y de esa manera se lleve a cabo las festividades, con la fe para que todo salga bien sin algún incidente
Cabe señalar que entre los comentarios de los feligreses, dijeron que hace cuatro años para esta fechas sucedió un lamentable accidente donde se perdieron varias vidas, durante una explosión en un taller de pirotecnia.
Así como tampoco hay que descuidar y bajar la guardia por el COVID-19, que todavía está en nuestro entorno, aunque con las vacunas y los cuidados se ha logrado minimizar los embates de la enfermedad.
De igual manera se contó con la participación de la embajadora parroquial, Jaqueline Canté Euan, junto con su club de jaraneros, palqueros, público en general, la diputación de la fiesta, autoridades municipales, acudieron a la casa particular de Antonio Mex, quien donó el árbol de ceibo que sirvió para sembrar en el centro del ruedo donde se realizarán las corridas de toros a partir de hoy hasta el domingo, así como bailes populares.
Con música de charanga y apoyado con una camioneta, varios voluntarios subieron la mata del ceibo para que no sea tan cansado para ellos, y bailando al ritmo de jarana, ataviados con el traje regional, llegaron al centro de la población a plantar el tradicional ceibo que simboliza para los mayas el "árbol de la vida".
Por su parte, los organizadores de le feria, dijeron que luego de dos años de espera por la Pandemia del COVID-19, se paralizaron las actividades, entre ellas las cuestiones tradicionales, culturales; sin embargo, ahora que se puede hacer, hay que seguir con los protocolos de salud.
Pablo Dzib, uno de los palqueros, dijo que es bueno que se hagan las actividades, cuidando los protocolos de seguridad, salud, para que la gente salga a divertirse sanamente, después de un confinamiento que nos dejó el coronavirus aprendizaje y con los cuidados sanitarios.
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MG