Pese a que el caso de violencia sexual y laboral denunciado por las trabajadoras administrativas y manuales de las facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán tuvo éxito al ser prescindió de los servicios Humberto Z, asociaciones Uady sin acoso y Cejudi, señalaron que no se realizaron procesos efectivos.
Aseguraron que se ha revictimizado a las agredidas, afectando sus derechos humanos, e incluso, no hubo una reparación de daño, ya que no menciona si el agresor recibirá rehabilitación o garantías de no repetición o si podrá ser contratado nuevamente, dijo Rosa Cruz Pech, directora Uady sin acoso.
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“Aunque los resultados fueron favorables para las compañeras, no se entregó ningún documento o correo para avalar lo el comunicado que se hizo en las redes sociales, únicamente una llamada en el cual nos dijeron lo publicado, pero sin explicar la continuidad del proceso, ya que al tratarse de la primera vez no existen antecedentes, pero creemos que había mejores maneras para no revictimizar y poder generar un espacio seguro para ellas”, señaló.
Silvia Esquivel, acompañante legal, dijo que gracias a la valentía han marcado un precedente en la Universidad, pero todos están de acuerdo que la violencia sexual afecta a los derechos humanos, el acoso y el hostigamiento amenazan la igualdad de oportunidades, que es por ello tienen la obligación de investigar todas las situaciones de acoso y hostigamiento a través de procesos efectivos y realizar una reparación integral que lamentablemente este no fue el caso.
Explicó, que para iniciar las quejas se interpusieron a través del protocolo de prevención, atención y sanción de la violencia de género, sin embargo, el procedimiento que se siguió fue conciliatorio laboral para conflictos individuales de trabajo el cual está pensando para conflictos y no por agresiones, por ello fue victimizante y violó los derechos humanos, por ejemplo las trabajadoras tuvieron que repetir en varias ocasiones las agresiones incluso frente al mismo agresor que las llamo mentirosas.
Otro punto es que no hubo confidencialidad, ya que apenas se puso la queja a la rectoría se le notificó al agresor, poniendo en peligro a las trabajadoras sin mencionar que no tuvieron asesoría legal violentando su acceso al derecho para la justicia e incluso de acuerdo al protocolo se le debió brindar protección.
“La medida no es de reparación integral que se pudieron realizar más además de la restitución, como rehabilitación o garantías de no repetición y solamente se menciona que será reincidido, pero no se sabe si se le dará cursos de reeducación, si lo pueden volver contratar”, finalizó.
Como se informó! hace unos días la colectiva Uady Sin Acoso realizó una manifestación pacífica en la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán en apoyo al personal administrativo que ha sufrido acoso de parte de Humberto Z.
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JG