Yucatán

Jóvenes de Yucatán subestiman daños por los 'vappers'; son una moda, revela médico

El médico de Alta Especialidad de la Península de Yucatán reveló que son jóvenes de 10 a 20 años los que consumen los 'vappers'
La venta de los vappers está prohibida, pero los jóvenes de Yucatán los compran / POR ESTO!

Los yucatecos subestiman los daños que causan los vappers o cigarrillos electrónicos. Cada vez son más las personas que consumen este producto, aunque su venta y distribución está prohibida en Yucatán.

Lamentablemente, son los jóvenes de 10 a 20 años quienes más lo consumen, desconociendo las repercusiones que tienen en su salud por las sustancias nocivas y adictivas que dañan los pulmones y producen enfermedades respiratorias y cardiacas, señaló el Dr. Arturo Cortés Téllez, titular de Neumología del Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (Hraepy)

“Esto de los vappers es una moda que se está viendo mucho, no sólo en la entidad, sino a nivel nacional, estos productos tienen más de 7 mil sustancias dañinas, como la nicotina, que es muy adictiva, por lo que podríamos decir que el 80?% de los que empiezan con estos cigarrillos electrónicos terminan consumiendo tabaco o cigarros regulares, ya que se produce el efecto de taxifilaxia, esto por la necesidad cada vez más grande de saciar la adicción a la nicotina que pide su organismo, es por eso que es aún peor este aparato”, dijo.

Asimismo, comentó que con base en estudios realizados por organismos en salud, se ha determinado que irritan los pulmones y producen enfermedades respiratorias y cardíacas; sin embargo, aunque son relativamente nuevos no se han investigado los efectos a largo plazo, pues las sustancias que tiene podrían causar cáncer.

De igual forma, indicó que se han dado casos de menores de 10 años que consumen este producto, pidió a los padres estar más pendientes de sus hijos, pues están expuestos a algo peligroso para su salud.

“Aunque afortunadamente desde el año pasado se tomó la decisión de prohibirlos, lo que fue una excelente idea, lamentablemente aún se venden y distribuyen y por ende se consumen, en un rango desde los 10 a los 20 años, que es cuando más frecuente se da. Hay que impulsar la información de los daños que causa y que los padres de familia verifiquen que sus hijos no los consuman”, finalizó.

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GC