CANDELARIA, Campeche.- El Agente Municipal de la comunidad de Paraguas, Alonzo Girón Meza, denunció amenazas de muerte por parte de Floricel Hernández Tozca, Valdimer Tozca López y Rayle Tozca López, quienes antes habitaban en esa localidad, pero tras abandonar sus deberes perdieron el derecho de un predio que ahora reclaman, a pesar de que viven en otra comunidad, según dijo el ofendido.
Expuso que además en represalias, estos tres sujetos golpearon brutalmente a su hijo, Juan Girón Meza, a quien le dieron con las cachas de las armas de fuego que portaban, por lo que los hace responsables de lo que les pueda pasar a él o su familia, además porque en la Fiscalía no han hecho nada a pesar de que interpuso su formal querella.
Dijo que en 2017 esas personas habitaban en la comunidad Paraguas, pero dejaron de colaborar de hacer faenas, incluso en plena asamblea palearon y por ese motivo la ley interna del poblado se desconoció como ejidatario a Valdimer Tozca, y los otros se fueron y abandonaron sus casas.
“A mi hijo lo dejaron medio muerto”
“Yo vengo de Chiapas, hablo lengua Tzeltal y me aceptaron el 25 de abril del año pasado, pagué mi ingreso y me vine con toda mi familia, yo pertenezco a la iglesia Presbiteriana, soy anciano, por lo que solicité un solar para construir el templo, el comisario ejidal me entregó uno de los que habían dejado abandonados los antes mencionados, pero yo sin saber si había problemas.
Cuando me lo entregaron, los dejamos limpio, viajé a Chiapas por un evento de la Iglesia y cuando regresé, ya se había quemado la casa que estaba en el predio, era una casa abandonada. Luego de dos días que se quemó, llegó a mi casa Floricel Hernádez Tozca y me amenazó con una escopeta; me acusó de haber quemado la casa y me exigía la cantidad de 30 mil pesos.
Le dije que lo arreglaríamos, pidió que se le reconstruyera su vivienda, aceptamos y fuimos construyendo, pero en diciembre el ejido me nombró Agente Municipal, ahí verificamos que ellos tenían dos años de haber abandonado el ejido y dejaron de colaborar en todo y se fueron a vivir al ejido La Peregrina.
Hace como 15 días pasó con un grupo de gente a amenazarme de nueva cuenta, estábamos construyendo la escuela y volvió a recriminarme por lo de su casa, le dije que viniera a la asamblea a platicar con la gente y me amenazó que le valía madres todo y que iba hacer lo que le diera la gana, llevaba terciada una escopeta.
Ante ello, tomamos un acuerdo con el comisario ejidal y acordamos arreglarlo pacíficamente ante la Fiscalía, le mandaron citatorio el viernes pasado, pero no se presentó y no se hizo nada, pero el miércoles esperaron a mi hijo a la entrada de la comunidad de Paraguas y lo agredieron, lo lastimaron y lo golpearon con las cachas de las armas que portaban, un rifle calibre 22, automático, con mira telescópica y una pistola los otros dos.
Le ocasionaron lesiones en la frente y la cabeza e incluso realizaron tres disparos al aire, por lo que junto con su esposa regresó a la comunidad de Paraguas a pedir auxilio, en tanto que se dio aviso a la Fiscalía, cuyos agentes acudieron pero no hicieron nada, por lo que temo por mi integridad y el de mi familia, por ello, hago del conocimiento de las autoridades sobre este caso de estas personas que andan fuertemente armadas y amenazando a la gente de estas comunidades, por lo que si me llegara a suceder algo a mi o mi familia, lo hago responsable de todo, concluyó.
(Texto y fotos: Redacción / POR ESTO!)