Yucatán / Sucesos

Halla a sujeto muerto en el monte

El cadáver de un adulto mayor fue encontrado en el monte, este miércoles, muy cerca de Caucel pueblo, en los lineamientos de Oxcum, Umán.

El macabro hallazgo lo realizó el señor Porfirio Martín, quien recogía basura y botellas para reciclar durante la mañana de ayer por la citada zona, por lo que tras recuperarse de la impresión dio aviso a las autoridades, acudiendo al sitio elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, que se encargaron de acordonar el área en lo que arribaba el personal de la Fiscalía para las diligencias de rigor.

Trascendió que el extinto fue identificado como Julio José Martínez, de 82 años de edad, quien salió de su domicilio en la colonia Pensiones el pasado domingo, al mediodía, y desde entonces no se sabía de su paradero.

Familiares del extinto comentaron que ese día don Julio acudió a encender una veladora a la tumba de su madre, en el cementerio Xoclán, sin embargo, según les indicaron testigos, en un momento dado se desubicó y ya no supo cómo regresar a su hogar.

El adulto mayor estuvo preguntando a vecinos del rumbo cómo retornar a su domicilio, pero por alguna razón se dirigió a Tixcacal Opichén.

La última información sobre su paradero es que fue visto cerca de la tienda Oxxo de Villa Magna, el lunes pasado.

Finalmente su cuerpo desnudo y en estado de descomposición fue encontrado ayer, en montes entre los linderos de Caucel pueblo y Oxcum, Umán.

Infartado en Kanasín

Por otra parte, un infarto acabó con la vida de un señor de 71 años de edad, quien murió en un basurero ubicado en el municipio de Kanasín, mientras laboraba.

Minutos después del fallecimiento, los compañeros del extinto descubrieron el cuerpo y aunque quisieron ayudarlo ya nada podían hacer, pues no tenía signos vitales.

El señor se encontraba laborando como todos los días en el basurero que se encuentra entre las comisarías San Antonio Tehuitz y Subincancab, cuando repentinamente se quejó de tener mucho calor y se retiró al interior de la caseta de vigilancia, con la intención de refrescarse.

Trágicamente, en un momento dado sufrió un infartó fulminante que acabó con su vida, sin que nadie se diera cuenta y hasta varios minutos después, cuando lo buscaban sus compañeros para que realizara su trabajo, encontraron el cadáver.

El extinto se encargaba de pesar el plástico que llega al lugar, así que por lo general era de los más activos, por lo que llamó la atención de sus compañeros que se desapareciera por un tiempo considerable.

Los trabajadores de inmediato llamaron a la policía para pedir ayuda, pero cuando llegaron los paramédicos ya nada pudieron hacer por el septuagenario.

(POR ESTO! Policía)