Yucatán / Sucesos

Por Ricardo Jesús Rivas

CHETUMAL, 4 agosto.- Un hombre, quien aparentemente había intentado quitarse la vida bajo los efectos del alcohol, protagonizó un bochornoso espectáculo en el Hospital General de Chetumal, luego de que cuando estaba siendo atendido de algunos cortes que se hizo en el brazo, se comportó de manera agresiva y tras amenazar a los trabajadores, incluyendo al médico en turno, intentó golpearlos.

Los policías municipales recibieron el reporte a las 01:15 horas, en el cual se informaba de un sujeto agresivo en el Hospital General de Chetumal, motivo por el cual acudieron a verificar los hechos.

Al llegar, una vigilante de seguridad privada les mostró a los policías el consultorio en el cual se estaba registrando la agresión, lugar en donde observaron a un sujeto, quien había sido llevado al lugar con algunos cortes en el brazo, por lo que de acuerdo con la versión de los trabajadores del nosocomio, al momento que le realizaban las curaciones y el respectivo vendaje, éste se comportó agresivo.

Los policías apoyaron al personal médico para que el sujeto reciba la atención, ya que presentaba tres cortadas en el brazo izquierdo de entre 5 y 8 centímetros de longitud, provocadas aparentemente por un supuesto intento de suicidio.

La actitud del sujeto seguía siendo violenta, amenazó de muerte de nueva cuenta al doctor, a los trabajadores y a los policías, por lo que el galeno señaló que nada impedía que fuera trasladado a la cárcel municipal, ya que las lesiones no ponían en riesgo su vida.

Los policías se encargaron de llevarlo al estacionamiento en donde estaba la patrulla para abordarlo a la unidad oficial, a pesar de que éste opuso resistencia al arresto.

De hecho, algunas personas que se encontraban en las afueras grabaron la situación, señalando que había un supuesto abuso de autoridad, situación que no existió.

El detenido fue llevado ante el juez calificador, lugar en donde dijo llamarse José Eduardo M. L., de 32 años, y se le impuso un arresto de 36 horas o el pago de su respectiva multa, por la falta administrativa de ebrio rijoso y alterar el orden público.