Yucatán / Sucesos

Dan 50 años de prisión a Medina Sonda

El Contador Martín Alberto Medina Sonda, preso en un módulo de máxima seguridad en Villahermosa, Tabasco, luego de ser declarado culpable del delito de feminicidio agravado, ayer fue condenado a pasar 50 años en el reclusorio, como coautor intelectual del asesinato de su esposa Emma Gabriela Molina Canto, registrada el 27 de marzo del 2017.

De la misma forma, los jueces integrantes del Primer Tribunal de Juicio del Poder Judicial, Licenciados Níger Desiderio Pool Cab, como relator, Fabiola Rodríguez Zurita, como presidenta, e Ileana Georgina Domínguez Zapata, tras dictar fallo condenatorio, también como coautor del crimen, en contra de Juan Ramón Moreno Hernández, (a) “El Cachorro”, le dictaron una condena de 35 años de sanción privativa de libertad.

Después de más de una hora de retraso de la hora programada y más de 10 interrupciones por fallas en el sistema de audio al estar enlazados por medio de la tecnología con Tabasco, se llevó al cabo ayer la audiencia en la que los jueces se pronunciaron sobre la individualización de penas, que tuvo que ser apoyada con el uso de un celular con el que se comunicaban a distancia con Medina Sonda y su defensa por medio del altavoz.

Los dos acusados fueron encontrados con un grado de culpabilidad equidistante entre le media y la máxima y a Medina Sonda se le impuso la pena máxima que rige en el Estado, 50 años de prisión, misma que comenzará a compurgar al término de la condena que enfrenta en Tabasco por desvío de recursos.

A Moreno Hernández se le impuso por mayoría de votos la pena de 35 años de prisión, ya que hubo un voto concurrente de la presidenta del Tribunal de Juicio, en lo que se refiere al homicidio calificado, sobre la alevosía, y en lo que se refiere al feminicidio agravado, en lo referente a la pretensión infructuosa del acusado Medina Sonda por restablecer una relación con la víctima.

Incluso para la Juez Rodríguez Zurita, la sanción a imponer a los acusados sería de 20 y 35 años, pero por mayoría de votos se le impuso 35 a Moreno Hernández y 50 a Medina Sonda, quienes también fueron condenados al pago mancomunado por concepto de reparación de daño emergente y por indemnización a las víctimas indirectas, por un monto de 8 millones 612 mil 758 pesos, así como al pago de una multa de mil días, equivalente a los 75 mil 490 unidades de medidas de actualización.

Se programó para el próximo día 20 de septiembre la audiencia de lectura y explicación de la sentencia, cabe señalar que durante la audiencia de ayer, Moreno Hernández se la pasó sonriente y platicando con los defensores, comiendo cacahuates, en tanto a Medina Sonda se le apreciaba serio detrás de la pantalla del monitor, dando una y otra vez vueltas a una pluma que tenía entre las manos, ninguno de ellos hizo uso de la palabra y dejan todo en manos de sus abogados.

Los defensores de Medina Sonda, encabezados por Fernando Saucedo Ramírez y David Araba Dorantes, al término de la misma manifestaron que recurrirán a la apelación y en caso necesario al amparo ante las autoridades federales, ya que para ellos no se acreditó con pruebas la participación de su cliente en la comisión del delito que se le imputó, que los jueces le dieron mayor credibilidad a los testimonios de un testigo protegido y no a los de ex funcionarios y celadores del reclusorio de Tabasco, que afirman que toda persona que ingresa al penal tiene que registrarse y pasar por varios filtros.

El testigo afirma que entró al penal para entrevistarse con Medina Sonda, pero que no se registró, ya que lo hizo a través de un custodio.

La madre de la víctima, señora Ligia Lugo Canto, expuso que seguirán en su lucha por la justicia, hasta las últimas consecuencias.

Su hija fue asesinada el 27 de marzo del 2017, a las puertas de su domicilio, marcado con el número 196 de la calle 28 entre la 35 y 39 del fraccionamiento San Luis, a manos de dos sicarios tabasqueños que le clavaron armas punzo-cortantes en distintas partes del cuerpo hasta dejarla muerta, Miguel López Tobilla y Jhonatan Mézquita Avalos, ambos sentenciados a más de 40 años de prisión.

Según la indagatoria y el desahogo de las pruebas ofrecidas a lo largo del juicio, su muerte fue ordenada desde la prisión de Tabasco por su esposo Martín Alberto Medina Sonda, quien le encargó a César Reyes Barrueta, (a) “El Huero”, ubicar a la víctima y con el apoyo de Moreno Hernández se llevó al cabo el plan de privar de la vida a la señora Emma Gabriela Molina Canto.

(PORESTO! Redacción)