Luisiano Cruz López denunció públicamente a los elementos de la patrulla PM 057 de la Policía Municipal, luego de detenerlo con lujo de violencia sin motivo aparente cuando se trasladaba a bordo de su bicicleta a su domicilio luego de una jornada laboral en la empresa Tolteca; los elementos acusaron al sujeto de circular en estado de ebriedad y bajo los influjos de sustancias tóxicas, sin comprobarlo.
El día martes, cerca de las 08:20 horas, Cruz López se trasladaba a bordo de su bicicleta sobre la calle 55 con dirección a su domicilio, luego de una jornada laboral en la empresa Tolteca.
Al llegar a la altura del puente de la colonia Obrera, fue interceptado por elementos de la unidad PM 057 de la Policía Municipal, quienes de forma agresiva lo obligaron a bajar de su bicicleta.
Una vez que descendió de la unidad fue golpeado por uno de los elementos por la espalda, el cual le ordenó abriera una mochila que trasladaba con él para transportar sus herramientas de trabajo.
Luisiano Cruz López preguntó a los elementos cuál era el motivo de la revisión, ya que él circulaba tranquilo y lo único que deseaba era llegar a su domicilio a descansar.
Los elementos tomaron esta acción como evasiva y sujetaron al hombre con fuerza inmoderada del brazo, a pesar que Cruz López informó que estaba lesionado de su extremidad, ya que hace algunos años había sufrido de una operación. Esto no fue bien tomado por los elementos, quienes le dijeron que les “valía madres” y ese no era su problema.
El hombre fue trasladado a las instalaciones del Ministerio Público donde fue remitido con el juez calificador en turno, mismo que sin ningún tipo de prueba certificó que Luisiano Cruz López estaba en estado de ebriedad y bajo los influjos de alguna droga, sólo con revisarle las manos.
El afectado exige a las autoridades que se haga justicia y que sancionen a los elementos de la patrulla 057 por utilizar exceso de fuerza y abuso de autoridad hacia su persona al inventar cargos inexistentes.
Por otra parte, el afectado expresó su molestia porque tiene que pagar una multa de mil 200 pesos para liberar su bicicleta, así como el traslado de grúa de 700 pesos y los días de estadía de su unidad, la cual se utiliza para transportarse de un lado a otro.
Molestia ciudadana
Cruz López mostró la impotencia que siente como ciudadano carmelita, ya que ahora no sólo se tiene que cuidar de la delincuencia, también de los elementos que según cuidan y protegen a los carmelitas, quienes dejan a un delincuente por detener a alguien que no puede defenderse.
(Texto y fotos: Ricardo Jiménez)