Mérida, Yucatán.- Luego de la explosión en un taller de pirotecnia el pasado 31 de diciembre, la tranquilidad no ha retornado a los hogares de Francisco Villa Oriente, en Kanasín. Y es que, hay preguntas que todos se hacen y nadie ha podido responder hasta el momento: ¿quién es el o los responsables de semejante tragedia? ¿por qué aún no hay detenidos? Ambas incógnitas tienen relación con la única víctima fatal.
Según información recabada entre los vecinos por reporteros del POR ESTO!, el predio donde se originó la explosión era frecuentado por una pareja que, a decir de los mismo testigos, no vivían cerca y nadie conocía su identidad. Ellos acudían a trabajar en el taller clandestino y se retiraban al terminar. Incluso, un menor de Kanasín fue empleado de la misteriosa pareja, sin embargo, debido a que ambos consumían bebidas alcohólicas e incluso fumaban en el taller, el menor decidió no regresar.
No se sabe si fueron las anteriores las causas de la explosión que dejó tres menores heridos y un muerto: el dueño del taller. Hasta el momento, se desconoce la identidad del occiso y de su esposa no se sabe nada, ya que no ha acudido a reclamar el cuerpo. Por otro lado, los vecinos aseguran que no es del rumbo.
Con información de Darvin Canché.
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