Ante la posibilidad de contagio, la Juez Segundo de Control del Centro de Justicia Oral de Mérida, Licenciada Ileana Georgina Domínguez Zapata, acordó suspender una audiencia de control relativo a un caso de comercio ilícito de bebidas embriagantes.
Además envió oficios a la Dirección del Centro de Reinserción Social del Estado para que los detenidos sean internados en un área aislada y se les proporcionen los cuidados medicos adecuados.
Pidió también que se les practique la prueba correspondiente para determinar si están o no enfermos de Covid-19 y se puedan tomar las decisiones pertinentes; por lo pronto, los acusados estarán recluido en el penal.
Según se dice, el pasado fin de semana agentes de la Secretaría de Seguridad Pública arrestaron a unas personas por venta clandestine y al ser puestos a disposición del Juzgado Segundo se programó la audiencia de control de la detención.
Sin embargo, antes de que se lleve al cabo dicha audiencia, se recibió en el Juzgado un oficio del Director del Centro de Reinserción Social, Profesor Francisco Javier Brito Herrera en el cual se informaba a la autoridad que los consignados presentaban desde su ingreso síntomas del Coronavirus, con fiebre y tos, incluso dolores musculares.
Ante tales circunstancias y en prevención de contagios, la Juez acordó suspender la audiencia y ordenar la reclusión de los presuntos clandestinos en un área aislada para los fines correspondiente.
Se señala que las autoridades consignan a personas sospechosas de la enfermedad al penal al que le endosan el problema para el cuidado de los enfermos.
También se dijo que se giraron instrucciones para que se cheque a las personas que tuvieron contacto con los detenidos, como lo son los policías aprehensores, ministerios públicos y demás que gente que intervino en el asunto.
(Armando Gamboa Romero)