Yucatán / Sucesos

Casi lo linchan por confusión

Alejandro “N”, de 26 años, oriundo del Estado de Tabasco, fue detenido por vecinos de la colonia Renovación Primera Sección y agredido en reiteradas ocasiones, luego de que fuera erróneamente acusado por su propio familiar -que se encontraba bajo los influjos del alcohol-, de intentar secuestrar a sus hijas.

Los hechos se registraron alrededor de las 12:10 horas del pasado sábado, cuando una mujer corría desesperada, gritando que un hombre acababa de secuestrar a su menor hija de aproximadamente 8 años de edad y se dirigía con dirección a las instalaciones de Protección Civil.

Sobre la calle Puerto Manzanillo los agentes de la dirección de Protección Civil pudieron observar que un grupo de vecinos había detenido a un joven, quien según ellos caminaba tomando de la mano y a la fuerza a una menor.

Al escuchar que supuestamente el sujeto había intentado secuestrar a la niña, no dudaron ni un segundo en comenzarlo a agredir hasta tirarlo al suelo boca abajo para pedir el apoyo de las autoridades, ya que tenían ellos en su poder a un secuestrador.

Al lugar de los hechos arribaron elementos de la dirección de la Policía Estatal Preventiva (PEP) quienes en compañía de la madre de la pequeña identificaron al presunto secuestrador, el cual llevaba como nombre Alejandro “N”, de 26 años, originario de Macuspana, Tabasco.

La mujer que se negó a dar su nombre, al ver que se trataba de su primo, dijo que nunca quiso secuestrar a la menor sino que éste había intentado salvarle la vida, pues su actual pareja sentimental, con la cual se encontraban ingiriendo bebidas embriagantes, había intentado asesinarla con un machete.

Los elementos preguntaron a la mujer cómo habían ocurrido los hechos, a lo cual ella dijo que se encontraba en compañía de su pareja sentimental y su primo en su domicilio particular ubicado en la calle Ingenieros, de la colonia Renovación Tercera Sección.

Riña

Bajo los influjos del alcohol, su actual pareja sentimental habría tomado un machete con el cual intentó apuñalarla y lesionar a las menores, por lo cual el joven Alejandro había decidido llevarse a las niñas lejos de ahí para evitar una desgracia.

Sin embargo, por la desesperación de la madre, pensó que sus hijas habían sido secuestradas, por lo cual comenzó a gritar y pedir ayuda a los vecinos quienes intentaron hacer justicia por su propia mano al agredir en reiteradas ocasiones al joven.

Finalmente los elementos policiacos no encontraron motivos por los cuales detenerlo, por lo cual dejaron en libertad al joven quien acudiría a un centro médico para que le realizaran curaciones en el rostro, pues presentaba diferentes heridas por los golpes que recibió.

(Texto y fotos: Ricardo Jiménez)