Una empleada del IMSS de Progreso causó un zafarrancho en pleno centro del puerto tras colisionar a una motociclista para luego intentar darse a la fuga, propiciando con ello intervención policiaca y hasta jurídica para arreglar el problema.
La afectada aseguró llamarse Wendy Flota y ser vecina de la colonia “Revolución”, con base en sus declaraciones, el problema se suscitó durante la tarde este jueves en la calle 74 por 25 y 27, justo enfrente del módulo de vacunación para infantes.
La afectada, esperaba doblar a mano izquierda en dicha intersección a bordo de su motocicleta Italika RC150, pero le fue propinado un golpe por alcance en la parte trasera de vehículo por parte de otra fémina que guiaba una camioneta marca Renault con matrícula YXE-230-D. Como consecuencia, un caso resultó destrozado y comenzó un intercambio verbal entre ambas mujeres desde sus propiedades.
“Le decía que no avanzara, había sentido el golpe y no se detenía la camioneta, cuando por fin lo hizo me aseguró esta persona que me pagaría el casco, pero en segundo metió reversa y se fue sobre la calle 25 para luego tomar la 76, mientras la gente me gritaba a donde se dirigía, porque había bastantes testigos” externó Wendy Flota.
Las féminas volvieron a encontrarse, pero ahora sobre la calle 27 por 76, con la diferencia de que ambas aparcaron y descendieron de sus vehículos para continuar discutiendo. La entrevistada puntualiza que incluso comenzaron a dirigirse rumbo a una tienda cercana de artículos de motociclismo para comprar otro casco; sin embargo, la trabajadora del IMSS huyó por segunda ocasión a su lugar de trabajo, ubicado en la esquina de la dirección mencionada.
“Entró al área de “medicina alternativa” y no quería salir, hasta que yo termine abriendo la puerta a la fuerza para decirle firmemente que tenía que darme un casco nuevo” agregó la agraviada.
Por tercera vez, las involucradas volvieron a cruzar palabras junto al lugar donde minutos antes habían aparcado sus vehículos, justo a las puertas de una dulcería de dicha esquina, solamente que ahora un abogado personal de la señora Wendy Flota y agentes de la Policía Municipal de Progreso ya estaban esperando a la funcionaria para que cumpla con la reparación de daños.
Cabe mencionar que la trabajadora del nosocomio incluso fue hostil con los medios de comunicación, argumentando que en la vía pública no se podían tomar fotografías de lo ocurrido, aunque en todo momento, los oficiales en turno y hasta las empleadas del comercio donde se tuvo la resolución del caso, intervenían para calmar los ánimos de la mujer dueña de la camioneta.
La presencia de los uniformados y el tumulto que se formó en el establecimiento captó de paso las miradas de varios transeúntes y automovilistas que atestiguaban la escena. Al final, la conductora de la camioneta Renault accedió a comprar un caso nuevo con valor aproximado de $400 pesos, pues de lo contrario los policías explicaron que el problema sería turnado al departamento de peritos, aparte de que su móvil sería trasladado al corralón ubicado al poniente de la ciudad.
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CC