La pavimentación con asfalto de las calles Pony y Potrero en la colonia del mismo nombre por 5 millones 104 mil 726 pesos, en menos de un año está llena de baches. Esta obra la cobró bien el constructor Alfredo Dorantes Cervera e hijo de Dulce María Cervera Cetina -candidata perdedora y vividora del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y que por años ha parasitado saltando de un cargo público a otro.
Ambos, hijo y madre, han sido beneficiados con contratos y cargos públicos inútiles por órdenes del corrupto ex gobernador Alejandro Moreno Cárdenas cuando estuvo en funciones el año pasado. Dorantes Cervera está aún en el padrón de contratistas del Ayuntamiento de Carmen a cargo del Espurio Oscar Rosas.
Los más de 5 millones de pesos que le pagó el Gobierno del Estado no corresponden a una simple y barata pavimentación con asfalto como la que hizo Dorantes Cervera en la avenida principal Potrero.
La calle no representa ningún “atajo” de alivio vial al tránsito vehicular de la zona, pero si incrementa el precio de todos los predios que ahí se encuentran, de 20 a 30 por ciento más de su valor actual aproximadamente.
Elecciones y fuga
de dinero al PRI
Fuentes del interior del corrupto Gobierno del Estado que encabezaba “Alito” en ese entonces, corroboraron que en 2018 antes del día de los comicios electorales, se pagaron todas las obras pendientes en Campeche, incluyendo esta para usar el dinero para operar en las campañas políticas.
Los constructores, cuyas empresas son usadas por la clase política priista en el Estado recibieron su paga antes de empezar a trabajar, como el caso de José Antonio del Río González, que recibió el dinero también antes de las elecciones por la obra que una empresa suya hizo con atrasos en un jardín de niños de Carmen.
La empresa que reconstruyó la Unidad Deportiva Infantil, Promoción y Distribución Cinco S.A. de C.V., también recibió la paga de su contrato por casi el 90 por ciento (más de 50 millones de pesos) antes del día de las elecciones el año pasado.
El proyecto de la calle Pony y Potrero fue licitado por la Secretaría de Desarrollo Urbano, Obras Públicas e Infraestructura (SEDUOPI) a principios de marzo del año pasado –licitación LO/904012996/E10/2018- y la obra de 153 días naturales de duración no la empezó Dorantes Cervera al mes siguiente como estaba planeada, sino que esperó que el Gobierno del Estado le pagara –fugara- el dinero del proyecto para empezar hasta finales del mes de agosto.
La obra fue concluida a principios de este año, pero el presupuesto de la obra podría haber sido depositado en su totalidad sin ni siquiera haber empezado la obra, antes del 1 de julio de 2018.
La calle
La empresa Ingeniería Integral Especializada en Servicios, Suministros y Construcciones S.A. de C.V., propiedad de Dorantes Cervera fue la acreedora del contrato para ejecutar la obra.
En la colonia El Potrero no viven muchas personas, menos de 10 viviendas se ubican a lo largo de los más de 600 metros de la cinta asfáltica dañada que atraviesa toda la colonia.
En este núcleo poblacional, la mayoría de los propietarios son empresarios y políticos que rentan enormes extensiones de terrenos a compañías constructoras y del ramo petrolero.
La calle nunca fue muy transitada y los pocos vecinos que hay alrededor usaban y van a volver a usar las vías alternas más eficientes por los enormes hoyancos que presenta ahora.
Por parte de la SEDUOPI que encabeza el “mala suerte” de Edilberto Buenfil Montalvo y que le dio el fallo de la licitación en 2018 a Dorantes Cervera, no existe ningún tipo de llamado de atención por la pésima calle que dejó.
(Texto y fotos: POR ESTO!)