Un grupo de peregrinos de Yucatán y Seybaplaya en el Estado de Campeche pasaron por la Isla en su camino a la Basílica de Guadalupe, y otros con destino a Orizaba, Veracruz.
Santos Gustavo Canul Camal, originario de la comunidad de Bolón, en Yucatán, dijo que desde hace seis años sale de su pueblo para cumplir con esta promesa de visitar a la “Morenita del Tepeyac” en Orizaba por haberle cumplido una petición que le hizo hace seis años.
Señaló que para él como el resto de sus compañeros, es complicado el viaje de 12 días desde su pueblo hasta Orizaba, pero lo hacen por agradecimiento a la Virgen que no los desampara y los cuida.
Dijo que en promedio se gastan hasta 200 pesos diarios en sus comidas, ya que llevan todo lo demás como son los parches para reparar las llantas de las bicicletas y demás, con la experiencia que ya agarraron el tiempo que llevan haciendo su promesa.
Señaló que en su caso, el principal peligro que ha tenido es una caída en la que se lastimó pero no pasó a mayores; por eso toman sus precauciones como no viajar de noche por la falta de visibilidad y sólo viajan durante el día, paran a comer y siguen para llegar a un sitio seguro para pasar la noche.
Por su parte, José Ricardo Uc Chan es originario de Seybaplaya, en Campeche, y desde hace cuatro años realiza esta promesa y en este año se les estaba complicando porque los que hacen el viaje con él no cumplieron y él decidió hacerlo solo. En su camino encontró a la gente de Bolón, Yucatán, y decidió unirse a ellos y realizar parte del viaje, ya que ellos van a Orizaba y él hasta la basílica de Guadalupe.
Señaló que hay gente que los ayuda en su camino y les da agua o comida, esos los alienta a seguir su camino con el riesgo de que algo les pase; pero él toma sus precauciones para llegar con bien y cumplir con su promesa.
Todos esperan estar en su casa el 11 de diciembre para que el 12 de diciembre puedan estar en la celebración de la Virgen del Tepeyac en sus comunidades, y por eso sólo estuvieron un rato en Carmen y siguieron con su recorrido para no perder tiempo y poder cumplir sus promesas.
(Texto y fotos: Jorge Villanueva)