Campeche

Un accidente de tránsito se registró la noche de ayer en la colonia Santa Margarita, luego de que uno de los automóviles no respetara sus semáforo en rojo donde causaron daños superiores a los 5 mil pesos; sin embargo, al no poder comprobar quien circulaba en preferencia, cada automóvil se quedó con su daño para evitar turnar el caso al Ministerio Público.

El accidente se registró alrededor de las 23:30 horas de ayer, donde presuntamente el conductor de un automóvil Volkswagen Sedan color blanco, con placas de circulación YZL-22-22 del Estado de Yucatán, circulaba sobre la avenida Páez Urquidi, con dirección a la colonia Pallas.

Cuando el guiador de un automóvil Hyundai Grand i10 color gris con matrícula WMA-721-A del Estado de Tabasco, propiedad de la empresa Equifarma, marcado con el número económico E-08 cruzó la avenida saliendo de la calle 38, donde presuntamente no respetó su semáforo en rojo colisionando con un automóvil Volkswagen y quedado atravesadas a medio cruce de ambas calles.

Por lo que se registró tráfico vehicular en la zona, obstruyendo el paso de los automovilistas quienes daban aviso al 911 para pedir el apoyo de las autoridades correspondientes, hasta donde llegaron elementos de Vialidad y Tránsito quienes fotografiaron las unidades del accidente y ordenaron que orillaran los vehículos para poder despejar la circulación de la avenida Paez Urquidi.

El técnico en hechos de tránsito le mencionó a los involucrados que si ninguno aceptaba su responsabilidad, cada vehículo se quedaría con su golpe al menos que decidieran turnar el caso al Ministerio Público para realizar una investigación y determinar quién era el responsable.

Cada conductor procedió a dar aviso a su respectiva aseguradora, las cuales minutos más tarde de igual forma comenzaron a evaluar los daños ocasionados a sus unidades e intentar llegar a un acuerdo; sin embargo, ninguno de los dos involucrado aceptaba su responsabilidad.

Finalmente decidieron quedarse con su golpe cada automóvil, para así evitar que el caso fuera turnado al Ministerio Público y las unidades remitidas al corralón, debido a que empezarían un proceso legal que podría tardar hasta meses en determinar al responsable, por lo que cada conductor recibió su respectivo pasa el taller mecánico para retirarse del lugar.

(Texto y foto: Brayan Zavala)