DZIBALCHEN, Hopelchén, Cam., 15 de diciembre.- Con una sagrada misa en honor a los abuelitos se celebró la homilía en la parroquia de San Juan Bautista de esta ciudad, donde mensualmente se les unge con una cruz en la frente para indicar que los abuelos son un claro ejemplo ante la sociedad y se les debe respetar y darles su lugar, explicó el párroco Manuel Santana Cardozo Pereira ante decenas de feligreses, quienes asistieron para acompañar a los hombres y mujeres que han hecho un bien en la comunidad.
Los abuelitos algunos llegan acompañados con familiares o de sus hijos, otros con silla de rueda, pero saben que la misa mensual es para honrarlos, y el párroco dijo que la oración es un mandamiento que se sigue a donde se debe atender a los ancianos, protegerlos, darles de comer y visitarlos, y la iglesia de Dzibalchén lo ha realizado desde hace años y sigue esta dinastía aún se cambie a los sacerdotes, pues con anterioridad Jaime Kim llegaba hasta la casa de los enfermos y ancianos para darles la comunión.
Los abuelitos muy contentos al comulgar y después se les da sus respectivos obsequios, pero se les acompaña en todas sus actividades, los hijos los consienten y los pobladores los regocija, pero un padre o una madre de edad siempre hay que protegerlos y merecen todo por ser nuestros autores de nuestros días, dijo el presbítero aunque muchos no los respeta y tampoco los cobija, pero es un pecado ante los ojos de Dios abandonar un ser querido, como un abuelito y no meren más castigos de lo que ya les dio la vida, explicó el párroco y después les ungió con una cruz en la frente.
(Jorge Amado Caamal Ek)