TTLa versión de desapariciones, ejecuciones y entierro de mexicanos en la frontera de Campeche con Guatemala, una de las más “porosas” en términos delincuenciales, podría no ser un mito, pues durante una incursión en dicho “foco rojo” internacional, POR ESTO! recogió información de que durante el año que concluye, por lo menos 50 candelarenses que se entregaron a actividades vinculadas al Crimen Organizado se encuentran en calidad de desaparecidos.
Luego de que fuera filtrada la versión sobre el aseguramiento de una avioneta y droga en un predio agropecuario ubicado entre las comunidades de El Sacrificio (Guatemala) y Miguel Hidalgo (Candelaria, Campeche), los reporteros de esta casa editora llevaron a cabo un recorrido por la zona, donde se constató la presencia del Ejército Mexicano, pero ninguna autoridad confirmó el suceso.
Durante su periplo, los reporteros del Diario de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía, entraron en contacto con habitantes de las comunidades de Miguel Hidalgo, Nuevo Coahuila y una familia de guatemaltecos radicados en la zona fronteriza.
La mayoría de las personas con las que interactuaron los comunicadores de POR ESTO! declararon que desconocían si en los últimos días y horas había tenido lugar algún decomiso de droga o aeronave –lo cual ha ocurrido con bastante regularidad en Candelaria-, sin embargo; un joven que recién llegó de Estados Unidos, solamente para enterarse de la desaparición de uno de sus hermanos, manifestó que algo terrible está ocurriendo en el mencionado municipio.
El joven manifestó que, en el caso de Miguel Hidalgo, son por lo menos 20 personas las que se encuentran en calidad de desaparecidos. Visiblemente preocupado, el informante declaró que el asunto de las desapariciones es algo en la que también coinciden con Nuevo Coahuila.
Con un gesto de apeno y enojo, el muchacho que entró en contacto con los reporteros de POR ESTO! declaró que debe reconocerse que los desaparecidos eran personas –en su mayoría jóvenes menores de 30 años- que estaban involucrados en actividades ilícitas.
De acuerdo con la explicación del entrevistado, algunos desaparecieron tras ser contratados para participar en actividades relacionadas con el trasiego, almacenamiento y transporte de cocaína, que es introducida a territorio mexicano, tanto por vía aérea como terrestre.
“Otros más desaparecieron cuando entraron a Guatemala para comprar droga. Nadie habla de ellos, porque la mayoría tenía problemas con la ley y con su propia familia.
“En el caso de mi primo, podría decirse que era huérfano, pues su padre falleció y su madre se fue desde hace más de 18 años a Estados Unidos. En el caso de mi pariente, pues nadie lo reclama, pero lo que estoy diciendo es una realidad.
“Aquí el problema es que las personas que han desaparecido tenían problemas con la ley; por ello, sus familiares evitan hablar del tema y mantienen la esperanza de que estén vivos”, dijo nuestro entrevistado.
También en Nuevo Coahuila
Nuestro informante también fue el encargado de conducir a los reporteros a la casa de una persona que enfrenta también la ausencia de un familiar; sin embargo, ésta se negó rotundamente a hablar del caso, aunque tácitamente aceptó que uno de sus parientes se encuentra ausente desde hace más de ocho meses.
En la zona, también se recogió la versión de un grupo de jóvenes candelarenses que se introdujo a Guatemala -en una zona donde los que se encargan de administrar las actividades ilícitas son miembros de la ex guerrilla y desertores del Ejército de Guatemala- y jamás se les volvió a ver.
Foco Rojo, cerca de El Porvenir
Uno de los informantes de POR ESTO! se encargó de servir de guía a los reporteros al camino que conduce hacia la comunidad guatemalteca de El Sacrificio. Como es de suponerse, en la señalética caminera no aparece el nombre del pueblo chapín, sino la de El Porvenir.
Para llegar al camino terracero que conduce hacia la línea de Guatemala-Porvenir, también está ubicada una guarnición de la SEDENA, institución que habría participado en el reciente aseguramiento de droga citado al principio de este trabajo periodístico; sin embargo, la presencia de esta institución no ha logrado disuadir a quienes se dedican a las actividades ilícitas.
A partir de que cualquier desconocido se interna por el citado camino, mismo que también presta servicio a prósperas fincas ganaderas, pocas son las personas que se atreven a interactuar con los desconocidos.
Por ahí solamente se transitan mejor a lomo de caballo y en motocicleta. Los reporteros de POR ESTO! lograron llegar a escasos dos kilómetros de la frontera con Guatemala; sin embargo, se logró interactuar con miembros de una familia mexicano-guatemalteca, que primero evitó interactuar con los comunicadores, pero luego tras ganarse algo de confianza, confirmaron la versión de los desaparecidos.
De acuerdo con la versión recogida por POR ESTO!, es muy posible que los parajes solitarios que conforman los más de 190 kilómetros que comparte Campeche con Guatemala sean la última morada de decenas de campechanos que tomaron el camino de la Delincuencia Organizada.
Presencia militar y policial
Una de las quejas de los pobladores de estas comunidades –área en la que también están ubicadas las comunidades de Estrella del Sur, Las Golondrinas, entre otras- es la escasa presencia de las policías municipal y estatal, en tanto que la Gendarmería y la Policía Federal únicamente hacen acto de presencia en la zona cuando se presenta algún delito de alto impacto.
Los ciudadanos consultados reconocieron que la única institución de la Federación que ha procurado mantener una presencia constante en la zona rural y fronteriza de Candelaria ha sido el Ejército, empero, también dijeron estar de acuerdo en que el número de elementos que hasta hace un año tenía la SEDENA en Candelaria era insuficiente para cubrir el amplio territorio fronterizo.
(Joaquín Vargas / Fotos: Alan Gómez)