ESCARCEGA, Cam.- La detención de Jesús Tomás Alvarado Chávez, alías “El Lagarto”, uno de los presuntos líderes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), a quien se le atribuye la autoría intelectual y material del asesinato de 13 personas en Minititlán, Veracruz, confirma a Campeche dentro del Atlas de la Delincuencia Organizada, situación que había sido minimizada por el Gobernador Alejandro Moreno Cárdenas.
Como POR ESTO! ya ha publicado en numerosas ocasiones, el Sur de Campeche es considerado como uno de los puntos, en donde durante los años 80’s y 90’s tenían lugar el trasiego y almacenamiento de drogas y el tráfico de indocumentados.
Sin embargo, durante las administraciones federales de Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa, la presencia de los cárteles de la droga tomó más arraigo en la zona, al grado de que se sabe que algunos capos, sobre todo del Cártel del Golfo e incluso de Sinaloa, habían escogido la Península de Yucatán como sitio de descanso o sitio donde prevalecía cierta tregua.
Sin embargo, tras la declaratoria de guerra a la Delincuencia Organizada por parte del panista Calderón Hinojosa, se incrementaron las actividades ilícitas (o al menos se hicieron más evidentes) en territorio campechano, sobre todo en los límites con la República de Guatemala y el Estado de Tabasco, en donde en forma cotidiana, las actividades criminales dejan firmado con sangre la constancia de su presencia.
De acuerdo con diversas publicaciones hechas por POR ESTO! se puede concluir que las actividades preponderantes de la Delincuencia Organizada en el Sur de Campeche son: el trasiego de droga proveniente de Sudamérica, secuestro de ganaderos y comerciantes acaudalados de los municipios de Escárcega, Candelaria, Carmen y Palizada y más recientemente el cobro de piso a giros negros y el control del narcomenudeo.
Es necesario mencionar que, mientras el tráfico de estupefacientes, por tierra, y el de indocumentados, eran atribuidos al cártel del Golfo, la presencia de narco-avionetas en la región era atribuida al Cártel de Sinaloa.
Los últimos secuestros
Entre los últimos secuestros que tuvieron lugar en el Sur del Estado se encuentran el del ganadero Víctor Hernández, propietario del Rancho “El Veracruzano”, ubicado en Aguacatal, perteneciente al municipio de El Carmen, ocurrido el 6 de noviembre del 2017.
Antes, en junio del 2016, tuvo lugar el secuestro de Sofía Domínguez Hernández, hija del ganadero Felipe Domínguez, cerca de la comunidad de Kilómetro 36. El plagio ocurrió cuando la mujer se desplazaba en una camioneta Chevrolet tipo Silverado, color plata, con placas de circulación TP-30238. Cuando al parecer dos sujetos armados con rifles AR15 sorprendieron a la mujer.
“El Panchillo”,
ex jefe de plaza
El cuatro de noviembre del año pasado, una persona murió durante un enfrentamiento a balazos que tuvo lugar en las inmediaciones de los ejidos Nueva Chontalpa y Felipe Angeles, en la región de Mamantel, cuando un comando intentó asesinar a Francisco Arsenio Ferrer Kuri, alias “El Panchillo”, quien fue procesado en el 2007 por ser parte de una célula delincuencial de “Los Zetas”, que operaba en los municipios de El Carmen, Escárcega y Candelaria y que se dedicaba al secuestro y distribución de droga.
El caso trascendió como un intento de secuestro, pero la versión que más relevancia cobró fue que Ferrer Kuri formaba parte de la banda de Nabor Vargas García, “El Débora”, uno de los fundadores de “Los Zetas”.
En los municipios de Sur de la Entidad residía la plaza del Cartel Pura Gente Nueva, ramificación y brazo armado de Cartel Jalisco Nueva Generación; dicha zona que era comandada por Fidencio Córdova Pérez, conocido como “El Potro” o el “Comandante Payán”, a quien se le atribuyen por lo menos 12 homicidios, además de secuestros, cobro de piso, narcomenudeo, así como robo y tráfico de combustible.
Campeche
¿El más seguro?
Apenas el pasado 11 de febrero, el Gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, tras citar cifras proporcionadas por el Consejo Nacional de Seguridad Pública, insistió en que Campeche era el Estado más seguro del país.
En diversas ocasiones, el Mandatario Estatal ha referido que su Gobierno ha mantenido a raya a la Delincuencia Organizada, aunque se ha visto obligado a reconocer que ésta ya tiene una presencia relativa en la Entidad, sobre todo en municipios como El Carmen, Candelaria y Escárcega.
Durante la administración de Enrique Peña Nieto, la Delincuencia Organizada se movió a sus anchas en la Península de Yucatán, arraigándose principalmente en polos de desarrollo como Cancún, Playa del Carmen y Cozumel, en Quintana Roo, pero también creció exponencialmente en sitios como Ciudad del Carmen, en donde existía un mercado o campo importante para la venta de droga, la extorsión y el cobro de piso.
Durante todo el sexenio de Calderón Hinojosa se estuvo manejando la versión de que los buques al servicio de Petróleos Mexicanos (PEMEX), estaciones marítimas y almacenes de dicha dependencia, estaban siendo usadas por la Delincuencia Organizada para el Tráfico de combustible por parte de “Los Zetas”. Sin embargo, a las denuncias y publicaciones al tema del tráfico de hidrocarburos se les dio poca relevancia.
Durante la administración de Enrique Peña Nieto, el Golfo de México y sus instalaciones petroleras se convirtieron en un paraíso para los traficantes de grandes volúmenes de hidrocarburos y, aunque la Secretaría de Marina (SEMAR) informó sobre esporádicos decomisos, nunca se dio a los casos la relevancia que merecía.
Fue hasta que inició la administración de Andrés Manuel López Obrador que se supo la importancia que tenía para la Delincuencia Organizada el “huachicoleo” de altura o sea, el que se tráfico de combustible que se realizaba a través de los barcos al servicio de PEMEX, las estaciones marítimas y demás infraestructura que prácticamente estaba bajo el control de “Los Zetas”.
Sin embargo, fue también durante la administración de Peña Nieto que ante las pugnas internas de los cárteles del Golfo y “Los Zetas”, que el CJNG, al que en sus inicios también se le conoció como el cártel de “Los Matazetas”, comenzó a interesarse por las plazas del Sureste del país.
La incursión del CJNG en Campeche propició reacomodos, así como pago en sangre, muerte y plomo. Sin embargo, aunque no es común que los grupos delincuenciales se manifiesten con la violencia que los caracteriza, la realidad es que siguen teniendo lugar violentas ejecuciones, sobre todo en Carmen.
CJNG, empoderado en Campeche
“El Lagarto”, no sería el único miembro del CJNG que se habría asentado en Campeche, estado donde se sabe que residen y han invertido su dinero importantes capos de la Delincuencia Organizada.
Tras la detención de Jesús Tomás Alvarado Chávez y/o Tomás Jesús Sánchez Alvarado, alias “El Lagarto” o “El Mata Niños”, en el municipio de Escárcega, se averiguó que dicho sector es punto familiar del capo, donde le permitía manejar el dominio en el territorio estatal.
Alvarado Chávez, confiado en su “poderío” en el Estado de Campeche y de la protección que gozó de muchos años, en esta ocasión se implementó un operativo de inteligencia, para lo cual utilizaron a los mismos elementos policíacos.
Sánchez Alvarado, cayó en confianza y en horas de la madrugada pasó por el filtro policiaco, y se presume que al consultar sus datos en la plataforma, resultó con órdenes de aprehensión.
De esta forma, lograron la detención del presunto líder de la plaza del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en el Sur de Veracruz.
Trascendió que en el municipio de Escárcega era escondido por familiares, ya que era bien sabido que dicho sector era utilizado como descanso del capo, esto por pertenecer como una extensión del violento cartel Jalisco Nueva Generación, donde a pesar de ser desmentido por las autoridades Campechanas esto termina siendo un secreto a voces.
A pesar de las acciones implementadas en el Estado veracruzano, el 70% de su territorio permanece bajo el cartel, siendo los delitos que van desde el trasiego, siembra y preparación química de estupefacientes, robo y venta de combustible, así como el cobro de extorsión a mercancía pirata y el cobro de piso a giros negros.
Fiscalía de “Alito”
guarda silencio
El capo se mantuvo bajo el resguardo de la Fiscalía General de Campeche hasta las 13:30 horas de la tarde, donde personal federal acudió para hacer cumplir la orden de detención y ser presentado en las próximas horas ante un juez para su audiencia de control por los delitos de homicidio.
Así mismo la Fiscalía General del Estado, en su afán de mantener la falsa imagen del Estado “más seguro”, NO ha brindado información respecto a la detención del violento capo, sumándose a que se mantiene descartando actividades ilícitas de carteles del narcotráfico y criminales bien organizados, comprobándose que Campeche es la “zona de descanso” de líderes delictivos.
Bajo vigilancia
Con armas largas de grueso calibre es como agentes estatales de investigación de la Fiscalía General del Estado custodian la dependencia, tras el aseguramiento de “El Lagarto”.
La FGE guarda total hermetismo sobre el aseguramiento del violento capo, ocurrido la madrugada del jueves, quien al ser descubierto, emprendió la huida, pero fue interceptado cerca de una estación de combustible, detenido y trasladado a la Vicefiscalía en Escárcega, donde horas más tarde fue llevado a la capital campechana, siendo alrededor de las 13:30 horas que un convoy del Estado de Veracruz se presentó a la FGE de Campeche.
(Texto: Joaquín Vargas / Fotos: POR ESTO!)