Misa de réquiem por ganadero y político

POC BOC, Hecelchakán, Cam., 19 de mayo.- La mañana de este domingo, con una celebración eucarística que tuvo lugar en la capilla edificada en honor a los “Tres Reyes Magos”, amigos y familiares recordaron al empresario, ganadero y político Raúl Eduardo Espadas Sosa, acaecido el pasado 31 de marzo de este mismo año.

El presbítero José Luis Ye Ehuán, en su homilía señaló que “el amigo Raúl ha respondido al llamado de Dios y hoy les pedimos a sus familiares y amigos que conserven la fortaleza y la fe ante los designios del Señor”.

Esto a poco más de un mes del lamentable deceso del empresario ganadero, donde hijos, nietos y amigos, acordaron este encuentro religioso en su tierra natal, en la que también se dieron cita personalidades de la vida política de la Entidad y que en su momento no tuvieron la oportunidad de darle el último adiós, al quien fuera en su momento regidor, secretario del ayuntamiento y hasta tesorero del Ayuntamiento de Hecelchakán en diferentes periodos.

Asimismo, el presbítero Ye Ehuán, quien en vida tuvo la oportunidad de tratar a Espadas Sosa, en su homilía, dijo que “hoy, le pedimos a sus familiares, especialmente a doña Malena y a sus hijos Raúl Héctor y Malenita, así como a sus hermanos César, Ligia y Landy, que conserven la fortaleza y la fe ante los designios del Señor”.

Al igual, aseveró que quien conoció y trató en vida a don Raúl, siempre lo recordarán y lo llevarán en su corazón, para que algún día poder reunirse con el cuándo Dios así lo disponga, porque la muerte es natural y es para todos desde que nacemos, al tiempo que hizo referencia sobre el gusto que tenía con la tauromaquia el amigo desde muy temprana edad y que lo llevó a ser ganadero.

Por último, los familiares y amigos, presentaron ante el altar principal de la capilla de los “Tres Reyes Magos” un cuadro con la fotografía de Don Raúl Eduardo Espadas Sosa, para después acordar reunirse de nuevo como siempre le gustó en vida al desaparecido empresario ganadero para fortalecer siempre los lazos de amistad.

(José Manrique Euán Martín)