CANDELARIA, Campeche.- Un presunto permiso de uso común expedido por alguna dependencia de Gobierno pone en peligro la reserva de mil 400 hectáreas de la reserva forestal de Pejelagarto, en donde están marcando árboles de hasta 100 años de antigüedad que serán derribados en fechas próximas.
Ambientalistas de este municipio pidieron la intervención de los tres órdenes de Gobierno para revertir esa situación, porque sería un verdadero ecocidio permitir que se concrete ese propósito.
Este martes, un grupo de ciudadanos se manifestó en contra de esa situación, en donde pudieron constatar la majestuosidad de los árboles de más de 20 metros de altura y con tantos años de antigüedad, por lo que sería un error permitir que sean talados, porque son las últimas reservas con que cuenta este municipio.
Además, en el sitio se encuentran vestigios de ruinas de los antiguos mayas, por lo que el lugar bien podría ser aprovechado para crear un parque ecoturístico en donde los turistas puedan apreciar esa belleza natural.
De permitirse este ecocidio por unos cuantos pesos, también se pondría en riesgo la gran biodiversidad de especies de animales que habitan en este lugar, como son monos aulladores, reptiles, venados, jabalí, pavo de monte, entre muchos otros.
Un grupo de alrededor 30 personas acudió al lugar, en donde amarraron letreros a los árboles, en señal de protesta a esta determinación de alguna instancia gubernamental, que realmente es incongruente con la situación que se está viviendo en el planeta, además de que se supone que esas dependencias ambientales están para conservar la naturaleza, no para alentar su destrucción.
El empresario Anselmo López Zapata lamentó que se expidan permisos a estas alturas para seguir depredando el medio y solicitó el apoyo de instancias ambientalistas del país o de todo el mundo, porque permitir que talen estos árboles sería una aberrante decisión y un crimen a la naturaleza, con repercusiones graves incluso al planeta, porque estos árboles son las últimas reservas que existen en el municipio.
Proyecto turístico
Pedimos a los tres órdenes de Gobierno que intervengan en este asunto para evitar la destrucción de esta reserva natural del municipio que bien podría servir como un parque ecoturístico, ahora con el proyecto del Tren Maya.
Dijo que los beneficios monetarios que los ejidatarios puedan obtener por la tala de estos árboles no se comparan con los graves daños que ocasionarían; más, en estos tiempos en que se supone estamos luchando contra el calentamiento global.
Permitir esta destrucción es incongruente con la política de nuestro Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien está preocupado por esta situación y ha implementado el programa “Sembrando Vida” precisamente para reforestar el país.
Creemos que esta medida fue arbitraria y bajo la mesa por alguna dependencia ambiental, por lo que solicitó la intervención del Gobierno en sus tres órdenes para impedir este ecocidio, porque para poder ver árboles de este tamaño y dimensiones tendrían que pasar de 80 a 100 años, remarcó.
Se dijo que no se trata de tiranizar a los ejidatarios, sino de que se busque indemnizar o implementar algún programa para que los campesinos sean los que cuiden esta reserva y no se destruya de esta manera.
Los inconformes portaban pancartas con consignas en contra de la destrucción e incluso colocaron letreros en los árboles ya marcados para ser destruidos e indicaron que no permitirán ese ecocidio, por lo que solicitan a la sociedad en general que se sume para impedir el ecocidio y al Gobierno que intervenga a la brevedad.
(Texto y fotos: Redacción /
POR ESTO!)