Campeche

Erosión e impunidad, sin freno

Mientras la empresa Oceanografía se lleva impunemente su embarcación “Caballo de Trabajo”, retirándola de su encallamiento frente a la colonia Tierra y Libertad, pero sin ningún tipo de sanción por la responsabilidad que recayó sobre ellos desde hace ya casi 2 años, cuando la empresa fue restituida a Amado Yáñez Osuna mediante un cuestionado convenio concursal, la batalla contra la erosión se ha convertido en una batalla contra el tiempo.

A la par de las maniobras para sacar la embarcación de más de 3 mil toneladas de peso muerto, el derrumbamiento del tramo carretero de la avenida Paseo del Mar avanza a pasos agigantados, pese a que ya se empezó a colocar parte del material dragado, hasta el día de ayer la lente de POR ESTO! documentó que en su zona más angosta apenas queda un metro de vía, mientras el derrumbe de arena continúa.

Ayer mismo trascendió que en los próximos días se requerirá una embarcación especializada para dragar desde el lado de babor de la nave, desde el mar y no desde la costa, pues actualmente sólo se ha logrado escarbar la parte de estribor por medio de la retroexcavadora, a unos cuatro metros de profundidad, pero será necesario ahondar mucho más en el lecho marino para lograr destrabar la mole de metal.

Hasta el momento, insuficiente

Así mismo, en la zona del derrumbe donde ya casi desapareció la vía vehicular, también fue posible notar que inició la colocación de tapetes de concreto flexible, aunque de acuerdo con las especificaciones de dichas barreras, estas sólo son una protección marginal para evitar la erosión, proceso que ya está en un estado avanzado.

Finalmente, cabe reportar que la zona que presuntamente podrá volver a ser de bañistas sólo ha sido señalizada con una cinta de precaución y un improvisado letrero que ya se encontraba en el sitio antes de iniciar las maniobras –incluso volcado hacia abajo, previo al dragado-, en el que se alerta del peligro a los posibles bañistas, pero nada más, y los trabajos se realizan sin la supervisión de Protección Civil u alguna autoridad ambiental.

(Texto y fotos: Carlos Valdemar)