Dejando ver sus verdaderos intereses, y defendiendo una actividad ilícita pero al margen de la Ley, que en los últimos años ha significado un sangría de recursos para el Estado Mexicano, el ex gobernador trunco Alejandro Moreno Cárdenas salió “facturero”, al defender -desde el PRI nacional que ahora dirige- el uso de facturas falsas y la defraudación contra el fisco mexicano, arguyendo que esto “alejará a las empresas y afectará a los empresarios”.
Sin embargo, el delito de evasión fiscal se ha sustentado en los últimos años en la facturación falsa que realizan algunos particulares, lo que se ha convertido también en un jugoso negocio para grupos dedicados a los delitos de “cuello blanco”.
Cifras del SAT, aún conservadoras, estiman que entre 2014 y 2018, durante el sexenio priista del expresidente Enrique Peña Nieto, casi 9 millones de facturas falsas fueron expedidas, lo que fue solapado por autoridades de todos los niveles, generando incentivos para violar la Ley, permitiendo que gran parte de la sociedad se dedicara a incumplir la Ley y sus responsabilidades tributarias.
Más grave aún, el simple uso de facturación falsa ha incentivado en los últimos años las actividades de evasión fiscal y de lavado de dinero. Es por ello que desde el Senado de la República se promueven reformas para combatir los daños al fisco mexicano, con la emisión de comprobantes de operaciones simuladas o el uso de firmas fantasma, actividades que se busca que sean consideradas delincuencia organizada y grave delito federal.
Pero el ex gobernador trunco Alejandro Moreno, ni tardo ni perezoso, salió a defender la ilegalidad y la comisión de actos contrarios a la Ley y a las obligaciones fiscales de las empresas y las personas, “Alito” dijo que desde el PRI presentarán acciones de anticonstitucionalidad para defender a los llamados “factureros”, pese a que se ha demostrado que esto afecta las finanzas nacionales y promueve la delincuencia. ¿Qué tipo empresarios defenderá el ex mandatario?
Farsantes
Ante la oposición moralmente derrotada del PRI, PAN y PRD, que dijeron estar en contra y promover acciones contra los esfuerzos en el combate a la evasión fiscal, el Presidente Andrés Manuel López Obrador calificó su postura como farsantes, “da hasta pena ajena” (...), defendiendo a defraudadores” y llamó “farsantes, arribistas, simuladores y politiqueros” a esos mismos partidos que permitieron que proliferara esa práctica.
“Es una vergüenza que un partido esté defendiendo estas cosas, y así se la pasaron durante todo el periodo neoliberal, votando para reformar leyes, reformar la Constitución y permitir el saqueo de México, y todavía se atreven a autonombrarse representantes populares; farsantes, simuladores, arribistas, politiqueros, corruptos, etcétera”, denunció en su conferencia matutina de este jueves.
Así mismo, reveló que el uso de “facturas falsas empezó hace algunos años y proliferó en el País. Esas cosas fueron protegidas, había respaldo político, pero llegar al extremo que los legisladores se opongan a que se castigue a defraudadores, muestran que tiene problemas esos partidos, tienen una profunda descomposición al interior, no es la moral la que los guía”. Entre ellos el dirigente del PRI, y ahora “facturero” Alejandro Moreno.
(Texto: Carlos Valdemar /
Foto: Especial)