VICENTE GUERRERO (ITURBIDE), Hopelchén, Cam., 16 de septiembre.- La sequía no afectó al cultivo de soya, todos los campos están llenos de flores, algunas tienen colgando sus vainas, dijo el líder de los soyeros, Fernando Catzín Aké.
Externó su confianza de cosechar tres toneladas por hectárea de la oleaginosa y obtener un récord de cosecha como hace en años, ya que cuentan con un promedio de 45 mil hectáreas del grano.
Informó que la sequía dañó en su mayoría los mecanizados de maíz en gran parte del municipio, ya que no soportaron el arduo calor que deshidrató a las plantas hasta disecarlas.
Además los gusanos infectaron los cogollos y dieron el ultimátum para dejar cientos de hectáreas en caña de maíz, mientras la soya con el sereno de la madrugada se hidrataba y al paso del día no le afectó para nada, por lo que los productores de todas las colonias sí lograran cosechar lo justo.
Estimó que el año pasado sí se perdió una buena parte de la soya por la falta de agua y las plantas no desarrollaron al tamaño necesario para resistir una temperatura cálida, por lo que quedaron a menos de 40 centímetros de alto y las vainas no dieron lo que se esperaba.
Ahora sí, las plantas superaron los 70 a 80 centímetros de altura en algunas partes, como el caso de la colonia Las Flores, donde llegaron hasta el metro de altura.
Fernando Catzín Aké dijo que en su parcela tiene cultivos de soya, el chile habanero y maíz, pero la carta fuerte de su cultivo son los dos primeros.
“Esperamos que mejoren los precios para poder levantar bien, toda la cosecha de la oleaginosa es por contrato, esto no lo compran los intermediarios o ‘coyotes’, la comercializamos a buen precio y aparte se nos entrega un incentivo por la comercialización, que es lo que esperamos que se nos deposite”, refirió.
Para culminar, dijo de la existencia de una certidumbre en el campo de todos los menonitas, en Iturbide, Dzibalchén, Bolonchén de Rejón, también San Luciano, Cano Cruz, Laureles, entre otros pueblos, donde tienen grandes extensiones de soya y al parecer superaron las 50 mil hectáreas que se esperan.
(Jorge Amado Caamal Ek)