NO hay estado de emergencia pese a daños por sequía

Más de 45 mil hectáreas de maíz y chihua se han visto afectadas por las sequías en el Estado de Campeche, principalmente en los municipios de Calakmul y Hopelchén, por ello el titular de la Secretaría de Desarrollo Rural (SDR), Ignacio Novelo España, expresó que actualmente se están comprobando mediante inspecciones las superficies dañadas para poder liberar el pago del Seguro Catastrófico en los próximos meses.

Aceptó que se han originado diversas problemáticas por el periodo de sequía, inclusive mayores a los registrados en los últimos 70 u 80 años, por lo cual las afectaciones han sido importantes en los cultivos ya sembrados de temporada de chihua y maíz.

De los daños ya registrados, dijo que ya se tienen contabilizados unos 33 mil 500 avisos de siniestros en cultivos de maíz, donde se han visto afectados poco más de 13 mil productores, así 12 mil avisos de siniestros en sembradíos de chihua, lo cual ha afectado a 7 mil productores.

Sólo Conagua puede emitir el estado de emergencia

No obstante, ante las peticiones de varios grupos campesinos que piden declarar un “estado de emergencia” en Campeche, por las afectaciones a los cultivos de maíz y chihua, el funcionario estatal aseguró que no son el ente indicado ni tienen las facultades para hacer una declaración de tal tipo ante las afectaciones agrícolas por las condiciones meteorológicas.

Asentó que el organismo con autoridad para declarar una situación de atención inmediata sería la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en donde se tienen datos mediante los cuales se confirma la presencia de una sequía intensa en Campeche, pero con características que no son idóneas para declarar a la entidad una zona de emergencia.

Novelo España argumentó que para la declaración de emergencia, se necesitan datos satelitales, los cuales no son de todos efectivos, pues la información recabada por los satélites no es igual a las obtenidas en el trabajo del campo.

Manifestó que si el satélite pasa por la Zona Sur y capta material vegetativo (pasto verde, forraje, paste de maíz) no se procede a declarar como un punto en estado de emergencia, pese a existir afectaciones palpables por una sequía abundante.

“Algunas organizaciones decían que Campeche debe declarar un estado de emergencia por las afectaciones de la sequía, pero no tenemos tales facultades para realizar dicha declaración y Conagua confirmó que las condiciones actuales de la sequía no son suficientes para etiquetar a la entidad como una zona de emergencia”, abundó.

Aseguradoras se encuentran analizando los reportes de siniestros.

En cuanto a los casi 50 mil reportes de siniestros, el titular de la dependencia precisó que actualmente se está comprobando mediante inspecciones, la identificación de las superficies afectadas, por lo cual sería hasta los próximos meses cuando se realicen los pagos del “seguro catastrófico” a los productores afectados.

Referente al tema, explicó existen dos tipos de seguros, siendo el primero el “Seguro Catastrófico”, de acceso gratuito y por el que solo se solicita un aviso de siembra y uno de siniestros -en caso de haber afectaciones- para acceder a la remuneración de los daños ocasionados por la sequía u otra afectación climatológica.

También detalló que mediante el Seguro Catastrófico se deben registrar un daño a los cultivos de 85 por ciento de la superficie, así como cumplir con otros detalles del contrato, por lo cual los afectados podrían percibir en los próximos meses hasta mil 400 pesos por hectárea dañada, con un límite de 20 pagos por productor.

Necesario tecnificar el campo

No obstante, tras los resultados obtenidos en las últimas fechas por afectaciones climatológicas, Ignacio Novelo declaró que ya es necesario tecnificar el campo, esto con el objetivo de evitar afectaciones por la aparición de sequias prologadas u otras situaciones.

También comentó que se podría analizar una modificación a los periodos de siembra, lo cual etiquetó como complicado, pues existen varios factores a tratar, como los productores acostumbrados a esperar las lluvias de los meses de septiembre y octubre y otros que deben cumplir con los tiempos de cosecha establecidos por las aseguradoras para no arriesgar lo invertido en caso de tener resultados desfavorables.

Agregó que durante este año se registró una disminución en el total de hectáreas aseguradas en caso de afectaciones por el clima, es decir, se aseguraron 25 mil hectáreas menos en comparación con las 90 mil protegidas durante 2018.