Campeche

Taxistas ya no quieren impuestos estatales

CAMPECHE, Cam., 2 de septiembre.- El representante de la agrupación de taxistas Pioneros del Camino Real con sede en Hecelchakán, Genaro Xool Madero, acudió al Instituto Estatal del Transporte para entablar diálogo con el director de la institución, Juan José Castillo Zárate, a quien entregó un pliego petitorio de 17 puntos, entre los que no se incluye solicitud de aumento a las tarifas.

Explicó que aunque las actuales tarifas han permanecido estáticas por varios años pese a los aumentos a la gasolina, sus demandas se refieren al pago de impuestos y a otros puntos que lesionan la economía de los transportistas.

Indicó que de los 17 puntos que abarca el pliego petitorio entregado al IET desde el pasado 24 de julio, destacan siete, entre ellos solicitar que el Gobierno del Estado no cobre impuestos a los concesionarios de la tercera edad y a quienes por alguna razón de fuerza mayor no tienen activa su concesión o tienen que contratar a alguien que la trabaje.

También piden que no se les cobre impuesto adicional a los particulares que inician el servicio con un vehículo nuevo, entre otras.

Abundó que se les lesiona con algunos artículos de la Ley de Transporte, por lo que solicitan que se deje de pagar o en su momento se reduzca el costo de las pruebas antidoping a los conductores, así como la certificación y pago de diversos trámites. Dijo que no están en contra de pagar impuestos sino de que no se les cargue la mano, pues los taxistas pasan por momentos de crisis.

Manifestó que no han aumentado la tarifa en 6 años y ésta oscila entre 30 y hasta 80 pesos por viaje, dependiendo de la ruta, mismas que consideró son bajas, por lo cual pidieron la intervención directa del Secretario de Gobierno, Pedro Armentía, ante el director del Instituto del Transporte, por los operativos que se realizan y agregó que mientras no lleguen a un acuerdo en base al diálogo y al pliego petitorio, deben suspender dichos operativos.

En este mismo sentido, señaló que otra cuestión es que no deben cobrarse placas cuando un vehículo es nuevo y va a ingresar al servicio del transporte público, pues la unidad sólo sustituye a la que ya no estaba apta para servir.

(Wilgen Lara)