En Campeche, la principal actividad económica y de empleo es la pesca, pero también es lamás riesgosa, ya que trabajan en temporada de huracanes y “Nortes”, con la finalidad de llevar sustento a sus hogares.
Por otra parte, sus herramientas de trabajo son costosas, aunado a que se enfrentan a robos que son el “pan de cada día”, en los que pierden sus instrumentos laborales y, en muchas ocasiones, hasta sus motores de los barcos.
Ante ello, los hombres de mar que pertenecen al Camino Real ya toman medidas de seguridad correspondientes para evitar robos y asaltos.
Los pescadores ribereños asentados en la costera de la capital campechana aseguran que los hechos ocurridos hace algunos días en el muelle de la Administración Portuaria Integral (API) en Lerma es el reflejo de la mala competencia que existe entre ellos y que por tal razón, se han organizado para no ser víctimas de robo, asaltos y atentados.
Explicaron que se tienen que cuidar del mal tiempo cuando se van a la pesca, pero también de sus compañeros, pues ya detectaron algunos que son los que extraen su material de trabajo.
“Lo que pasó en Lerma es un ejemplo de que la ambición de acaparar todo saca lo peor de cada persona”, aseguró Ernesto, un pescador que ha sido víctima de robos en reiteradas ocasiones durante los 25 años y quien se ha dedicado a la pesca, razón por la que no quiso dar sus apellidos y solicitó al Por Esto! no fotografiarlo.
Como medida precautoria se han organizado por grupos para realizar caminatas por toda la orilla del mar en horas de la madrugada y noche en días esporádicos, además, en algunas zonas han colocado mantas con mensajes de advertencia donde aseguran que a los que sean sorprendidos robando serán linchados.
“Estamos cansados de que siempre nos roben las cosas que con mucho trabajo compramos, otros hasta sacamos a crédito las cosas y algunos compañeros empeñan sus casas ¿Usted cree que es justo que nos roben? Nosotros no nos vamos a dejar”, dijo José, pescador ribereño.
Los pescadores de los tres muelles campechanos han iniciado la compra de equipo de seguridad, radios y chalecos para cuando se hagan a la mar vayan mejor preparados, además aseguran que no será un gasto en vano ya que falta un par de meses para que termine la temporada de Frentes Fríos y en junio inician las lluvias fuertes.
(Jorge Chan)