El presidente municipal de Campeche, Eliseo Fernández Montúfar engañó y sigue engañando a los ciudadanos incrédulos que votaron por el en el pasado proceso electoral. Es gente que no ve la realidad de este funcionario público, quien “grita a los cuatro vientos” que el sí cumple sus compromisos.
Esta es la mayor falsedad y para muestra un botón: en la calle Allende entre Lazareto y Juárez, del fraccionamiento Prado, se ubican varias tapas rotas que cubren el drenaje, lo que pone en peligro a los automovilistas que transitan por el lugar. “Para fregar, esta situación ya tiene más de un año y aún no es atendida nuestra demanda de reparación”, acusó Luis Felipe Granados Gutiérrez.
No cabe la menor duda que el alcalde Eliseo Fernández Montúfar es de “oídos sordos”, ya que desde hace más de un año los vecinos del fraccionamiento Prado le hicimos la petición para que sean reparadas las tapas que cubren parte del drenaje ubicado en las calles Allende y Juárez. Meses atrás han sido colocadas dos barras o estructuras metálicas para evitar que algún automovilista, motociclista, ciclista o ciudadano sufra algún accidente que tengamos que lamentar, indicó.
Tanto su servidor como vecinos de Prado hemos hecho diferentes demandas a las autoridades del Ayuntamiento de Campeche, específicamente a la Dirección de Parques y Jardines y al superintendente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para que manden personal a cortar las ramas de un árbol ubicado en la calle Hidalgo casi esquina con la Juárez. El follaje ha cubierto gran parte del cableado de energía eléctrica, lo que podría ocasionar en un momento dado un cortocircuito.
Dicen dos conocidos refranes “Más vale prevenir que lamentar” y “Después del niño ahogado tapan el pozo”. Esto es lo que le mandamos a decir los vecinos de este fraccionamiento a nuestras autoridades para evitar que el día de mañana leamos en los periódicos o escuchemos en medios de comunicación electrónicos, que alguna persona fue víctima de una descarga eléctrica al caer un cable de alta tensión, debido a que el peso de las ramas del árbol provoco la caída de los cables. Esperamos que esto nunca ocurra, advirtió.
(Juan Carlos Hernández)