Campeche

Madre desmiente presunto robo de menor

SAN ANTONIO SAHCABCHEN, Calkiní, Cam., 26 de febrero.– Gran movilización de la Policía Municipal se registró en la comunidad por el presunto robo de una menor, en el que más tarde la madre desmintió lo que ocurrido, pero mientras continúa la psicosis por los últimos casos de extravíos y robos de pequeños, varios de ellos con trágicos resultados lamentablemente.

La alarma por el presunto robo motivó que la gente voceara para que la población salga y se capture al supuesto ladrón suelto en este lugar y que está causando pánico entre la población.

Al mismo tiempo una señora cuando estaba limpiando su terreno este miércoles lo vio pasar cuando al parecer se estaba dando a la fuga.

Los hechos ocurrieron después del mediodía de este miércoles, en el sitio que arribaron agentes de la Policía Municipal, que se percataron de los iracundos pobladores en plena calle.

Al dar las características del sujeto: persona con gorro café y playera blanca, complexión delgada, que salió corriendo al ser encontrado por la señora que estaba limpiando su terreno.

Esta situación se viene viviendo desde el lunes a las 20:30 horas donde se vio sospechosa a una persona dentro de la casa y más tarde al llegar y ver sus pertenencias estaba revuelto todo dentro del ropero por una persona delgada.

Cuando uno de los hermanos salió a prender fuego, vio movimiento y salió corriendo la persona que anda robando y escondido en un terreno, según comentaron los afectados.

Aseguraron que desde el lunes pasado la gente no duerme bien y vive una pesadilla por la presencia de personas que intentan robar en las casas y esto los tiene molestos, por lo tanto pidieron la intervención de la Policía Municipal para brindar mayor vigilancia o en su caso advirtieron que los pobladores harán justicia con sus propias manos.

Y todo esto que ocurre desde que se abrió un minisúper y empezó a llegar gente de fuera para hacer cosas indebidas, al acusar que sobre la calle 25 sujetos orinan al tomar bebidas alcohólicas hasta altas horas de la noche, aprovechando la falta de vigilancia policiaca.

Al salir los niños de la escuela primaria los alarmó al percatarse de la multitud y los policías discutiendo con los pobladores, los cuales exigían seguridad.

(Néstor Cuevas)