Campeche

Los vendedores de pecado del mercado Pedro Sainz de Baranda aseguran encontrarse a la deriva a causa del poco flujo en los negocios de comida.  Al extremo de vender tan sólo el 30 por ciento de su venta promedio.

 

Para sobrellevar la situación, comentaron que algunos de ellos han realizado un giro en su modo de venta, preparando diversos guisos con el fin de que los clientes no tengan que prepararlos.

 

También, otros comerciantes dijeron que una alternativa para generar algo de ingresos es a través del servicio a domicilio; vendiéndose bajo el concepto de producto fresco hasta la puerta del hogar.

 

No es un caso único, vendedores de alimentos que pueden funcionar a pesar de la fase 3 del COVID-19 han señalado que las ventas continúan bajando, y que tienen que recurrir al ingenio, ya sea notas con mensajes optimistas, promociones atractivas y demás para generar los ingresos necesarios para atravesar la crisis en la que se encuentran.

 

Por Redacción Digital Por Esto!

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