Campeche

La Constructora Escalante, propiedad de la familia de políticos como Ana Martha Escalante Castillo y el agresivo ex secretario de la Sedeco, Gabriel Escalante Castillo, se suma a las empresas que están despidiendo a sus trabajadores durante la contingencia sanitaria.

El pasado 28 marzo, José del Carmen Alvarez fue despedido aparentemente sin fundamentos válidos y sin recibir liquidación alguna de la Constructora Escalante, controvertida empresa y de las consentidas por anteriores gobiernos estatales y federales.

Al empleado hoy despedido le prometieron un pago, pero un mes después no lo han querido atender, relató José del Carmen Alvarez en entrevista con POR ESTO!, quien señaló que le dieron la promesa de que lo liquidarían el día 24 de abril, pero al llegar el día, nada; no había nadie en las oficinas, las cuales estaban cerradas.

“Nada más el guardia estaba ahí, No nos han dado la cara nadie de los despedido”, relató el ex empleado.

Asimismo, explicó que no es sólo él quien fue despedido de manera arbitraria, comentó que son más de una decena de personas que han tratado de solicitar sus respectivos pagos, pero hasta ahora no se los han otorgado.

El pasado sábado 25 de abril, José del Carmen volvió a presentarse en las oficinas de la Constructora Escalante, pero de nueva cuenta, nadie lo atendió.

El despedido relató al Diario de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía, que los días de confinamiento han resultado complicados para él y su familia, porque al igual que muchos campechanos, él vivía con los ingresos que ganaba día con día.

“Como él tiene para beber y comer con su familia, por eso no se preocupa; en cambio yo, ni dinero ni trabajo. Estoy sin chamba y ni forma de llevar unos centavos a la casa tengo”, señaló con lamentación.

El ahora ex operador de volteo aseguró que no pide nada que no le corresponda, ya que él y sus compañeros tuvieron que tolerar diversos problemas internos, aunado a la falta de seguridad social, económica y laboral dentro de la Constructora Gordillo.

“En buena onda le pido que me liquide y ya, sería todo, que me dé lo que comprenda que me debe dar, porque no es uno ni dos años de estar trabajando allá, son 34 años”.

Externó además que desde hace 6 años les suspendieron el reparto de utilidades y sólo les otorgaban préstamos económicos que apenas llegaban a los 600 pesos si corrían con suerte. Ese es lo único que les daban y nada más, explicó.

“El Seguro Social no lo pagan, pero sí nos lo descuentan; en el Infonavit sucede lo mismo: hay muchos compañeros a quienes están cobre y cobre y no mandan el dinero al Infonavit”, señaló.

Cansado de las largas, dijo que si el propietario de la Constructora no quiere llegar a ningún acuerdo, tendrá que proceder legalmente contra quien resulte responsable.

“Voy a tener que llegar a las últimas consecuencias; o sea, le voy a meter una demanda”, pues asegura, que ha dedicado prácticamente toda su vida a la empresa de los Escalante, “para que de buenas a primeras me den de baja y me dejen sin liquidación económica”.

(Jorge Chan)