Campeche

Unas 12 mil hectáreas de cobertura forestal han sido afectadas en el Estado de Campeche,  como consecuencia de los incendios forestales; sin embargo, eso ha sido una constante, un ejemplo de ello, es que del 2010 al 2020, la Reserva de Los Petenes ha perdido más de 100 mil hectáreas de bosques y manglares, declaró el ambientalista Alexandro Brown Gantus.

“Lamentablemente ya estamos inmersos en un desastre ecológico. La naturaleza es muy noble, pero ésta depredación está ocasionado un desequilibrio ecológico, causando por ejemplo sequías prolongadas en sitios como Calakmul e inundaciones en otras”, expuso el ex regidor por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Brown Gantús consideró que la crisis que enfrenta el país por la pandemia del coronavirus debe llegar al Gobierno para reflexionar sobre el modelo de desarrollo, pues una vez más quedó demostrado que el petróleo no es garantía de solidez económica, pues como se recordará, el precio del crudo decayó en forma tan drástica que llegó a tener un valor negativo, de menos de dos dólares.

Abundó que uno de los temas del que nadie habla es el de los ingresos que recibe la nación por los servicios ambientales que brindan los manglares del país, por la emisión de bonos de carbono, mismos que superan tres veces los ingresos petroleros.

“Definitivamente no se debe permitir más daños a nuestras reservas ecológicas, sobre todo en estos tiempos donde el cambio climático es una realidad que nos está afectando a todos. Deben pues canalizar los recursos y trabajar en coordinación todas las dependencias federales, estatales y municipales en materia ambiental; es la única forma de poder revertir los daños causados.

Pérdida de

cobertura forestal

Según datos de Greenpeace, México ocupa el quinto lugar en deforestación. Cada año se pierden alrededor de 500 mil hectáreas de árboles en el país, según ese organismo.

Datos de la organización Observador Mundial de Bosques (GFW), en el 2019 afirmó que el Sureste mexicano, en especial la Península de Yucatán, está perdiendo en forma dramática su cobertura boscosa, de Campeche (56 mil 424), Quintana Roo (38 mil 811) y Yucatán (24 mil 412 hectáreas).

“El mal avanza, pero parece que el tema ecológico no ocupa un espacio prioritario; llevamos 7 años con sequías consecutivas, lo cual nos indica que ya no estamos ante un fenómeno atípico, pero el Gobierno no cuenta con un plan para atender la problemática.

Recientemente, la Comisión Nacional Forestal (Conafor) informó que la superficie afectada por incendios forestales, en lo que va del año, asciende a 11 mil 392 hectáreas, ocupando Campeche el lugar 6, en cuanto a los estados con mayor superficie afectada  (12 incendios), con 8,006 hectáreas.

-The Nature Conservancy (TNC) -desde hace 7 años- viene diciendo que anualmente se pierden 80 mil hectáreas de superficies forestales en Campeche, como consecuencia de sequías, incendios, ampliación de la frontera agrícola y pecuaria, pero sobre todo por la siembra de soya transgénica, sorgo y maíz forrajero.

En los últimos lustros, las familias menonitas –y algunos grupos reducidos de empresarios (locales y foráneos) del ramo agrícola- se han esmerado en ampliar las superficies que destinan a la siembra de soya transgénica, ante la insaciable hambre de materia prima de la industria aceitera yucateca.

En teoría, en Campeche ya no hay permisos para nuevos aprovechamientos forestales; tampoco para producir carbón u otros subproductos forestales, sin embargo, eso no ha impedido que año tras año los productores de soya talen o quemen intencionalmente áreas consideradas como selvas en recuperación.

(Joaquín Vargas Aké)