Las acciones altruistas se van replicando y, ayer, el carnicero Oscar López Ruiz contribuyó con la ciudadanía al donar más de media tonelada de carne de puerco a las familias de más escasos recursos, quienes acudieron al mercado “Pedro Sainz de Baranda” para obtener un kilo de carne gratis.
En el Diario de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía se han difundido las acciones altruistas a las que se han sumado diversos campechanos del sector privado, quienes buscan aliviar con algo la crisis alimentaria que están viviendo las familias campechanas.
En esta ocasión el controvertido introductor de carnes, López Ruiz, se sumó a los donativos y otorgó de regalo un kilo de carne de puerco a quienes acudieron a su puesto en el principal centro de abasto; desde las primeras horas se formó una larga fila para recibir, en esta ocasión, de manera gratuita el alimento.
Acompañado de su familia, esposa e hijos, “El Tarado” López sonreía mientras las personas pasaban por su kilogramo de carne de cerdo que llevaría hasta las mesas de sus hogares.
A manera de guasa, algunos expresaron el lunes de frijol con puerco, se podría convertir a un miércoles, con tal de tener este popular alimento que forma parte de la cocina campechana.
Para el controversial carnicero, sólo es retribuir con algoa las familias campechanas, que en este momento se encuentran pasando por una situación difícil, sobre todo para quienes han perdido el empleo y este tipo de ayuda viene a aliviar un poco la situación.
El comerciante aporta desde su trinchera para que las familias necesitadas puedan llevar el alimento un día más al hogar y no cabe duda que con el ingenio de las mujeres campechanas, un kilogramo de cerdo sería una buena comida con demás ingredientes.
Esta acción es motivo de orgullo del carnicero, sobre todo que cuenta con el respaldo de su familia, que también participó en el acto altruista; muchas personas se formaron y esperaron su turno sin provocar tumultos o conflictos entre los presentes para tomar su kilogramo.
De 9:00 a 10:00 horas, el local de Oscar, en el mercado principal, fue un hervidero de gente, sin embargo se trató de cumplir con las medidas sanitarias como la sana distancia y sin entrar en contacto con quienes hacían su cola para recibir el alimento.
De manera fluida se pudo observar que la ciudadanía se comportó sin provocar enfrentamientos y respetando en la medida de lo posible la distancia que pide la Secretaría de Salud, como una medida preventiva de evitar el contagio del coronavirus.
Algunos incluso llegaron “pisando la raya”, porque ya se estaban acabando las bolsas preparadas para regalar, que, de acuerdo con la familia, fueron más de 500 kilogramos los que repartieron, todo encaminado a ayudar a las familias en estos momentos de contingencia.
En estas páginas se ha informado de empresarios campechanos que se solidarizan con sus semejantes y están repartiendo comida para aquellas personas de colonias populares que demandan alimentación en estos momentos de confinamiento, como el empresario gasolinero Ricardo Tax May.
(Wilbert Casanova Villamonte)