Campeche

Minisúpers se recuperaron en un 50 %

El levantamiento de la Ley Seca sí benefició a los minisúpers a reactivar su economía, pero algunos representantes del mencionado giro comercial también destacaron que se debe revisar la normativa en la venta de cervezas y licores para dejar fuera de la jugada a los dedicados a la venta de bebidas etílicas de forma clandestina.

El representante del Frente Unico de Propietarios de “Minisúpers” de Campeche, Marcos Canul Estrella, recalcó que la situación, si bien tiene tintes positivos, igual es complicada, lo citado porque desde principios del año en curso no se ha dado un buen panorama para los negocios del mencionado sector.

Explicó que desde principios de año la situación económica ya andaba mal y con la presencia de la pandemia por el COVID-19, las cosas se agudizaron de forma repentina en lo negativo, lo que aseguró se agravió más con la aplicación de la Ley Seca en abril, siendo un golpe muy duro en sus ingresos.

Canul Estrella agradeció a las autoridades que se haya levantado lo mandatado por la Secretaría de Salud, pues desde el martes se impulsaron las ventas con la apertura de las actividades de forma restringida o regulada, sin olvidar que como propietarios del giro comercial percibieron un incremento en los ingresos de hasta el 50 por ciento.

De forma consecutiva detalló que el 50 por ciento en el incremento de venta, los apoyó para cubrir gastos de operación, aunque también no es lo suficiente para permanecer en la actividad y seguir creciendo a futuro.

El líder empresarial declaró que los criterios establecidos en la Nueva normalidad, tras la aún vigente crisis por el COVID-19, no les favorece de forma total, pues en los fines de semana es cuando más se vende y quienes no respetan la reglamentación se aprovecharán al laborar en la ilegalidad durante los domingos y lunes.

“La reducción del horario deja la puerta abierta para que los negocios originados y multiplicados en la Ley Seca, los clandestinos, sigan operando, esto durante los domingos y lunes, cuando el mercado será dominado por quienes venden cervezas y licores a los clandestinos, lo cual se debe considerar”, mencionó.

Agregó que la venta de bebidas alcohólicas a domicilio es una desventaja y competencia desleal, en primer punto por la falta de respeto a la tipificación en la ley de alcoholes, donde se dicta que no es algo permitido, ello porque igual es un medio por el cual no se sabe si se vende bebidas etílicas a una persona menor de edad o adulto.

(David Vázquez)