Más de 20 mil hectáreas bajo el agua

VALLE DE YOHALTÚN, Cam., 4 de junio.- Con más de 20 mil hectáreas cubiertas por el agua en el Valle de Yohaltún, al igual que el camino de acceso, en la vasta región de parcelas de más de 500 hectáreas hubo pérdidas para todos los productores de sorgo, maíz y arroz, la cuales son incuantificables.

La actividad agrícola en esta importante región quedó inundada y los ranchos ganaderos movilizaron sus reses a partes altas de la comunidad de Nayarit de Castellot.

El productor arrocero y piloto agrícola, Oswaldo Irad Esquivel López, no pudo llegar a su rancho al quedar inundado el camino y cubiertas cientos de miles de hectáreas bajo el agua. Fue a través de las redes sociales que habla de un daño descomunal para los productores agrícolas y ganaderos de la región.

Son ya fuertes pérdidas económicas las que afrontan campesinos agrícolas en la región del Valle de Yohaltún, debido a que tienen cultivos bajo el agua y han perdido decenas de colmenas de apiarios, adempas de vacas, ovejas.

Campesinos, apicultores y ganaderos de la región, al estar inundada la carretera hacia la zona de cultivo del Valle de Yohaltún, la cual está cubierta por el agua, no pueden precisar o señalar con exactitud el monto de los daños económicos que deja a su paso “Cristóbal”, cuyas lluvias continúan de fuertes a torrenciales en la región.

Por otra parte, el ganadero Gustavo Díaz expresó que perdió varias reses que se entumieron por quedar entre el agua, por lo que al movilizarse para cambiar de lugar a su ganado a partes más altas de la comunidad de Nayartit de Castellot, al contabilizar las cabezas de ganado, notó que le hacían falta dos vacas y varios becerros. Presume que éstos se perdieron o murieron ahogados al quedar cubiertos los campos; entumieron y posteriormente murieron ahogados.

Externó que prácticamente las más de 20 mil hectáreas que se ubican en la zona de cultivo, que antes se usaban para sembrar arroz, de unos años acá sólo se utiliza el 25 por ciento para sorgo, maíz y muy poco arroz.

“Unas 2 mil hectáreas de la gramínea a lo mucho quedaron sepultadas con el agua; prácticamente todo los cultivos de temporal se perdieron, el agua lo inundó todo, las pérdidas son descomunales, no se puede cuantificar al quedar todo bajo el agua, pero es un duro golpe a los productores, campesinos y empresarios agrícolas que todo su patrimonio haya quedado bajo el agua”, finalizó.

(José Valencia)