Debido a la emergencia sanitaria, la Asociación de Comerciantes y Microempresarios Isla del Carmen (COMISCA), reportan que sus ventas son de 10 a 20 por ciento, lo que ha provocado que los comercios se vean en la necesidad de cerrar sus negocios.
“Los comerciantes estamos muy mal, hay agremiados que han fallecido o han perdido algún familiar; hasta el momento no tenemos datos de baja en el padrón, pero una vez que se regularice, haremos un conteo”, mencionó Juana Lozada, presidenta de COMISCA.
Apuntó que el recurso que obtienen es sólo para los gastos básicos del hogar, sobreviven con sacrificios y algunos han tenido que endeudar en su negocio para adaptarse a las nuevas condiciones.
Sin apoyo
En la asociación existen diversos giros, peluquerías, fruterías, lavaderos, pollerías, carnicerías, tortillerías, taller automotriz, consultorios y venta de ropa, entre otros, pero quien realmente se ha visto afectado, es el comercio de segunda necesidad.
“Algunos continúan en espera de un crédito del cual les otorgarían cinco mil pesos; muchos se anotaron pero hasta el momento a ninguno le ha llegado el préstamo, pues presuntamente carecen de documentación”, aseguró.
Dentro del padrón están registrados 290 comerciantes y el 20 por ciento no ha reanudado labores, pues algunos mantienen en confinamiento y otros no cuenta con el sustento económico para reabrir.
“El gobierno Federal y municipal tienen nuestros datos personales, pues nos cobran impuestos; no es difícil detectar al comerciante que necesita un préstamo. Si ellos tuvieran ganas de apoyar al comerciante, lo harían”, finalizó.
Texto y fotos: Irene Barradas