Las comunidades indígenas de la región del Camino Real, donde pasa las vías del ferrocarril que serán utilizadas por el Tren Maya, atesoran y cuidan sus zonas arqueológicas cercanas, porque prevén se convierta en verdaderos atractivos turísticos, alguna de ellas hasta entes de la pandemia reportaban muy pocos visitantes.
Campeche cuenta con 17 zonas arqueológicas con acceso al público, que fueron cerradas de manera temporal por la emergencia sanitaria generada por el Covid-19, y hasta el momento como parte de la nueva normalidad no se han establecido estrategia para su reapertura.
De los cuales, uno se localiza en el municipio de Hecelchakán, la zona arqueológica Xcalumkín, una más en Tebano, Kankí, seis en la región de Hopelchén y 7 en el municipio de Calakmul, donde actualmente se concentra el mayor número de visitantes, además de Edzná que corresponde al municipio de Campeche.
Por el avance del proyecto de Tren Maya, ha despertado el interés de los pobladores por cuidar sus zonas arqueológicas cercanas a sus comunidades, confían que habrá buena demanda.
Kankí, Tenabo
La zona arqueológica de Kanki, está cerrada debido a la pandemia del COVID-19, de acuerdo a habitantes de la comunidad solo en los primeros días de mayo cuando reúnen a los turistas, por el fenómeno arque astronómico de Kinich Ahau, y el resto del año solo unos cuantos.
En un recorrido por la zona, la más emblemática del municipio de Tenabo se constató la poca actividad de rescate y nula presencia de visitantes.
Algunos productores de la región como Antonio Uc, Manuel Dzul y Daniel Moo indicaron que a diario van por ese camino que va a la zona arqueológica de Kanki y no hay han visto turistas aun cuando no existía la pandemia.
La zona arqueológica se ubica en el municipio de Tenabo, a 20 kilómetros de la cabecera municipal sobre la carretera estatal Tenabo – Kanki, cuyo camino de acceso es de terracería en malas condiciones, lugar donde se practica la agricultura.
El núcleo de la zona arqueológica de Kanki el escenario es distinto, hay un escenario de limpieza y orden, cuenta con un módulo de recepción en óptimas condiciones para ser visitada.
En ella se encuentran el mascaron sagrado, una figura de por lo menos seis metros de longitud, por 3 metros de alto, también hay otros atractivos como montículo de piedras labradas , chultunes, abundante vegetación y reina la fauna al ser un lugar protegido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
De acuerdo a los habitantes, el lugar como tal está conservado, sólo el camino de acceso hasta el lugar es el que está en malas condiciones sobre todo el época de lluvias que se vuelve fangoso, pero con el paso del Tren Maya puede resurgir y ser un importante fuente de ingreso para la región.
Consideran que falta difusión y promoción, que puede lograrse con la llegada del Tren Maya que pasará por ese municipio.
Xkalumkín
Pobladores solicitan a las autoridades intensificar la difusión y promoción de la zona arqueológica de Xkalumkín, para habilitar más módulos de servicios y enriquezca el museo con el que cuenta dicha zona arqueológica.
Según los pobladores, es un planteamiento generalizado, porque quieren que esa zona arqueológica se promueva el turismo, ya que cuenta con mayores atractivos que disfrutar al ser uno de los sitios más ricos en epigrafía y de los mejores ejemplos de la arquitectura Puuc en el estado.
El profeso Marcos Mut Euán, invitó a visitar dicha zona arqueológica, por ser pieza clave para el turismo en la ciudad y en esta región, en donde al igual se exhiben diferentes piezas halladas en la zona del “Palacio de los Cilindros”, que es la estructura más grande del sitio, una escultura antropomorfa sentada llamada “La vieja”, el “Edificio Norte” o de la serie inicial que cuenta con tres aposentos.
Los ciudadanos plantean la necesidad de buscar la manera de como rescatar otras pirámides que se encuentran ocultas en el área rica en flora y fauna, ya que el turista busca tener contacto con la naturaleza con una actitud de respeto al medio ambiente y de revalorizar la herencia cultural.
Estiman que el paso del Tren Maya hará ese lugar de gran importancia, por ello desde ahora deben invertir e intensificar la promoción, como elemento de motivación y atracción del turismo.
Xculoc, Hopelchén
En todo el edificio de la zona arqueológica con denominación (Chunhuhub) no sufrió daños de consideración por los fuertes aguaceros que dejo la tormenta tropical Amanda y Cristobal, pero por la pandemia sigue cerrado con cero visitantes y que es difícil reactivarse en caso de que no haya promoción.
El vigilante Venustiano Paat Yah, dijo que los edificios de la zona ya fue valorado por personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia INAH y se dijo que mientras siga la pandemia no puede ingresar nadie de que no sea personal de la institución.
Chunhuhub se ubica a menos de 5 kilómetros de la comunidad de Xculoc, frontera con Yucatán y a Bolonchén a 18 kilómetros desde la vista no se nota las pirámides con sus estructurales pues de la orilla de la carretera como a 150 metros solo podrán ingresar cuando termine la emergencia sanitaria.
Considera que está entre los atractivos que puede tender una mayor demanda de visitantes cuando se regrese a la normalidad, pero sobre todo cuando entre en funcionamiento el Tren Maya.
Por Javier Pool, Amado Caamal y Manrique Euán