Rosa Martínez y Olga Guzmán Cadena, dos viudas de trabajadores petroleros, uno de ellos falleció por COVID-19 y el otro por enfermedad degenerativa, denunciaron públicamente que el Secretario General de la Sección 42, les ha negado la última plaza para sus hijos, pese a que es un derecho que tienen los trabajadores sindicalizados de planta como se encuentra la cláusula 54 de los estatutos del sindicato y el Art. 56 que habla sobre los derechos de los familiares de los sindicalizados en caso de jubilación o fallecimiento. Las mujeres expresaron que esos derechos que les corresponden a los hijos de los trabajadores se venden al mejor postor, hasta por 500 mil pesos.
Rosa Martínez, viuda de Rodríguez, explicó cuando inició la pandemia de COVID-19, se aplicó la Cláusula 43 del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) firmado entre sindicato y Petróleos Mexicanos (Pemex) donde personas con enfermedades degenerativas (hipertensas y diabéticas) no tenían que subir a plataformas marinas, sin embargo, su esposo como persona responsable y trabajadora tuvo que subir porque así se lo mandaron los funcionarios sindicales.
Noticia destacada
Elección del próximo líder sindical de Pemex será el 31 de enero: Secretaría del Trabajo
Agregó que el 29 de abril del 2020 su esposo bajó de plataforma con síntomas de COCVID-19, tenía temperatura, de tal modo que se comunicó a Pemex y lo enviaron a casa, a Ciudad Madero, Tamaulipas, lo monitorearon por varios días como sospechoso, 7 de mayo se puso mal y lo internaron a la clínica de Pemex, estuvo casi un mes hospitalizado, y falleció el 6 de junio del 2020, el acta de defunción se encuentra por COVID-19. Apuntó que durante el tiempo que su esposo estuvo infectado careció de apoyo de la Sección 42, no tuve el gusto de conocer al funcionario de nombre Carlos González, ni al secretario general de esa sección, Luis Gerardo Pérez Sánchez, con la primera persona que se comunicó fue con Valentín Martínez otro funcionario sindical de la Sección 42, le dije sobre la situación de su esposo, sin embargo, no tuvo el apoyo que esperaba.
Dijo que luego de la muerte de su esposo viajó de Ciudad Madero, Tamaulipas, a esta Isla para realizar algunos trámites en la Sección 42, para su viaje tuvo que vender algunos bienes, porque no tenía dinero, sin embargo, al llegar a la oficina de la Sección 42, le negaron el acceso que por protocolos sanitarios y fue atendida a fuera por el señor Marco Antonio Azuara y Valentín, quienes le entregó las documentaciones de fallecimiento de su esposo.
“Cuando le hago hincapié al señor Azuara sobre el beneficio que me corresponde como viuda dijo que no, que sí es por la cuestión de la planta que entre ellos no corresponde dar fichas, plazas y que no se va a arreglar nada, pese a que los estatutos marcan que es un derecho que le corresponde a un miembro de la familia”, añadió.
Por su parte Olga Guzmán Cadena, viuda del trabajador Jaime Lezcano Masías, dijo que su esposo laboró 21 años en Pemex, y falleció de una enfermedad crónica el año pasado, a pesar del riesgo que corría por la pandemia, él subía a plataforma, y cuando el falleció fui a ver a Luis Gerardo Pérez Sánchez, para que le ayuden con la última plaza que le corresponde a su hijo como lo dice la cláusula 54 de los estatutos del sindicato y el Art. 56 habla sobre los derechos de los familiares, sin embargo, le dijeron que no se puede hacer nada.
En tanto Alfredo Guerrero Martínez, un jubilado y que pertenece a la Sección 42, expresó que, en el 2019, en una plática que tuvo con el secretario general de la Sección 42 Luis Gerardo Pérez Sánchez, le dijo que estaba próximo a jubilarse, por lo tanto, quería que le ayudara con una última plaza para su hija y le dijo que “chance” hasta se pierde la plaza Manifestó que él imparte cursos a trabajadores petroleros y que una categoría que pocos conocen y que aparte es riesgosa, en el intento de ablandarlo le dije que le echara la mano para su hija y me dijo que menos, esto le enojó, porque es una clara muestra de discriminación a las mujeres, muchos trabajadores tienen hijas y no las pueden recomendar.
Después de eso me dirige a Manuel Rentería Acevedo, presidente del Consejo Local de Vigilancia, a quien le expuso la situación, y le mencionaron que lleve los documento a Antonio González para que los revise; el 1 de abril entregó la documentación para que vean que es mi hija, sin embargo, lo enviaron al área de estadística con Ramón Medina, luego con Sergio Valdez secretario del Interior y el 22 de enero del 2020 le dicen que con esa fecha está en lista de espera para el otorgamiento de la ficha.
Expresó que a él lo jubilaron el 28 de febrero del 2020, ante de ello metió una demanda en la Junta de Conciliación; pero no se llegó a nada, y la antepenúltima audiencia del 28 de septiembre, delante de la Juez le pusieron trabas.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
JG