En días pasados la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche (Codhecam) dio a conocer que entre la caravana migrante habían detectado algunos casos de COVID-19 y que la Secretaría de Salud (SSa) no había brindado atención médica, realizado pruebas y mucho menos aplicado vacunas; sin embargo, el Instituto Nacional de Migración (INM) y la SSa revelaron que las principales enfermedades que tienen los migrantes son Infecciones Respiratorias Agudas (IRA) y problemas en la piel.
La titular de la SSa del Gobierno del Estado, Liliana Montejo León, confirmó la detección de enfermos en el círculo poblacional instalado en el Centro Deportivo de Ciudad Concordia, provenientes en su mayoría de países sudamericanos, pero los síntomas no son similares a los del SARS-CoV-2.
Las afecciones que padecen los viajeros están relacionadas con problemas de piel, tos, escurrimiento nasal e infecciones respiratorias, debido a su exposición al cambio de temperaturas registradas en la Entidad: elevadas durante el día y bajas por la noche. Señaló que “atendemos a los que están allá. Estamos ahí de manera permanente con un médico y una enfermera”.
Dijo que realizan la promoción a la salud y la identificación de casos que pudieran presentarse como sospechosos a quienes realizan la revisión médica y en caso de tener sintomatología a COVID-19, aplican las respectivas pruebas de reacción en cadena de la polimerasa (PRC).
Agregó que iniciaron con capacitación a estas personas para que logren detectar la sintomatología del nuevo coronavirus entre sus compañeros, así como el protocolo a seguir cuando se confirme algún caso positivo.
En lo que respecta a las condiciones sanitarias, la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Campeche (Copriscam) realizó la distribución de hipoclorito de calcio y cloración de depósitos de agua, también ofrecieron pláticas de manejo higiénico de alimentos y saneamiento básico, lo que permitió la protección de más de mil personas.
En el lugar se han realizado más de 97 pruebas, de las cuales ninguna ha sido positiva; han revisado a más de 400 personas originarias de República Dominicana, Ecuador, Cuba, Haití, Venezuela y Nicaragua, quienes solicitaron el servicio. Entre ellas, niños y embarazadas.
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JG