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Algunos ciudadanos aseguraron que tienen empleos ajeno a lo que estudiaron debido a las pocas oportunidades que han surgido debido a la pandemia generada por el COVID-19

La situación económica actual ha orillado a adultos jóvenes y adultos a buscar opciones de empleo ajenas a su perfil profesional o de estudio, por una alternativa que les permita subsistir sin las prestaciones que la ley obliga a los patrones, que en ocasiones a pesar de cumplir como empresa fiscalmente, solamente ofrecen el sueldo mínimo sin darlos de alta en alguna institución de salud, o emprender por su cuenta, mientras ocupan a familiares o se asocian con amigos para generar ingresos, características principales que llevan a fomentar la Informalidad Laboral en Ciudad del Carmen, así lo expresaron los ciudadanos en un sondeo.

La constante en este ejercicio realizado en la ciudad, los ciudadanos contestaron bajo reservas en muchos de los casos, pero sí expusieron los motivos que los condujeron a aceptar tal empleo o buscar alternativas mediante una sociedad para capitalizarse y emprender un negocio, donde destaca el ambulantaje.

Algunos de los entrevistados coincidieron en que hay muchos profesionales que han optado por trabajar en algo que tienen poca experiencia, así como por un sueldo menor con “tal de tener trabajo, no solo porque tenemos hijos, sino que también porque tenemos que apoyar a nuestros padres o para seguir estudiando para no ser una carga más para nuestros padres”, mencionó una pareja.

Ellos, como muchas familias han tenido que sobrevivir con el sueldo mínimo en rubros de la economía cuyo perfil no encaja, por ejemplo, ambos son licenciados en Turismo, pero uno se dedica a la venta de vehículos y el otro a la docencia, sin prestaciones.

Otros jóvenes, como José Daniel Vásquez, de 25 años y estudiante del noveno semestre de la licenciatura en Enfermería en la Facultad de la Salud de la Unacar, dice que, aunque tiene la posibilidad de poner en práctica lo que aprendido no lo hace porque no tiene las garantías necesarias como estudiante o en su caso como pasante, que económicamente sabe no le será remunerado por su poca experiencia en el sector público y en el sector privado sabe que tampoco tiene las garantías.

Por ello, prefiere trabajar en un local del centro de la ciudad vendiendo diferentes artículos por un sueldo mínimo que lo ayuda en sus estudios, y aunque sabe que no cuenta con las garantías, si es un poco más seguro, cayendo en la informalidad, al no tener las prestaciones de ley.

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GH

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