La sequía fue un factor decisivo para no contar con una buena cosecha de miel, además los precios se desplomaron y por ello ahora el gremio de apicultores se encuentra en problemas económicos, pues en este 2023 invirtieron recursos en los apiarios, pero no los recuperaron, externó el comisario ejidal de Chencoh, Ramiro Ek Itzá.
Al respecto de la baja producción mielera, reveló que murieron miles de abejas a causa de la prolongada sequía y que por ello este año no hubo buena cosecha del dulce; sin embargo, expuso que esta problemática se suma que aún no se recuperan de las afectaciones por las tormentas del 2020, cuando “Amanda” y “Cristóbal” inundaron una vasta región y destruyeron miles de colonias de abejas en la zona Chenera y lugares cercanos.
“Muchos apicultores aún no se han recuperado de las pérdidas, además no hubo ayuda de un seguro. Luego en 2021 hubo baja producción y en 2022 apenas comenzábamos a registrar ganancias pues nos compraron la miel a 55 pesos el kilogramo, pero este 2023 apenas la pagan a 28 pesos”, dijo.
Aseguró que la sequía en este año acabó con gran parte de las abejas que se tenían en los apiarios a los costados de la selva y cerca de los campos menonitas, como Las Flores, de Chencoh. Además, las abejas enfermaron y murieron a causa de los agroquímicos altamente tóxicos.
Recordó que en 2022 había un aproximado de dos mil colmenas repartidas entre 100 apicultores, pero ahora esa cantidad apenas es una fracción, casi la mitad, por lo cual no obtienen suficientes ganancias para adquirir lo necesario y continuar con la producción.
En ese sentido, el comisario criticó que no hay apoyo de parte de los gobiernos municipal y estatal, pues “cada quien se defiende como puede, pero quien tenga manera de conseguir recursos económicos debe abandonar su apiario y dedicarse a la milpa”, asentó.
Espera
Finalmente, comentó que se mantienen a la espera de las lluvias para que haya floración y se alimenten los enjambres; sin embargo, expuso que ya pasó más de una semana de junio y aún no llueve, hecho que no sólo afecta a los mieleros, sino a todo el campesinado pues actualmente están retrasadas las actividades de siembra en la región ante la falta de humedad.
Abundó que en caso de no presentarse las precipitaciones, entonces habría pérdidas que serían difíciles de estimar, pues se trata de la producción de todo el municipio, el cual tiene en su mayor parte a productores dedicados al 100 por ciento a las labores del campo.
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LV