
Un trabajador petrolero denunció que tras ser operado de un ojo hace año y medio, su salud se vio comprometida, al grado que ha sido declarado con discapacidad permanente, desafortunadamente, tras solicitar su jubilación por la condición de salud, no quieren reconocerle sus 23 años de servicio y quieren proceder bajo el régimen del afore. Así lo denunció el afectado, Toribio de Jesús Pérez Díaz, un hombre de 50 años, quien está en silla de ruedas y con oxígeno permanente, dijo que su caso es uno de los cuatro que enfrentan esta misma situación y que prácticamente han sido abandonados por su sindicato, por lo que, determinó proceder legalmente en contra de esta violación no solo a sus derechos laborales, sino también humanos.
En entrevista, el afectado contó que ingresó a Petróleos Mexicanos (PEMEX) el 16 de agosto de 2003 y acumuló 18 años y medio de servicio, de los cuales solo un año y medio fue como empleado de planta, tras obtener la basificación como parte de un proyecto que ordenó el ex presidente Andrés Manuel López Obrador. Desafortunadamente, su salud se complicó en uno de sus ojos, por lo que, en octubre de 2023 fue enviado a Villahermosa, pero hasta mayo de 2024 le dijeron que necesitaba cirugía y fue en agosto del año pasado que lo operaron.
Su estancia en la Ciudad de México, durante su recuperación de la cirugía oftalmológica, tuvo complicaciones con una afección en pulmones, dejándolo con fibrosis crónica pulmonar, principios de insuficiencia renal, neuropatía diabética casi no camina, usa silla, por lo que, pidió a su Sindicato, promover su jubilación, pero hasta ahora no han hecho algo para que proceda como debiese ser.
Ante su mermado estado de salud y la solicitud de incapacidad, pasó de la Cláusula 121 y a la 122, lo que lo perjudica al privarlo de pagos y ampliaciones; en el oficio número PS-SO-2930/2024, la Sección 47 del STPRM escribe al jefe del Departamento de Personal Carmen Suroeste, Juan Alejandro Reyna Velázquez, donde se solicita la ampliación de la incapacidad médica bajo la Cláusula 121 del Contrato Colectivo de Trabajo Vigente (CCTV); a pesar de su estado, Pemex no le ha otorgado la ampliación de su incapacidad y tampoco ha concluido su proceso de jubilación, dejándolo en una situación económica y de salud precaria.

“Me quieren jubilar con el régimen de AFORE algo que no estoy de acuerdo, tengo 73 mil pesos ahorrados quien vive con eso, si me pudiera valer por cuenta propia ni me quejaría, pero no es justo que después de 23 años me salgan con esto y me abandonen a mi suerte, es una burla. La Sección 47 me dicen que no pueden hacer algo, porque ya está dictaminado, creo que es falta de voluntad”, reprochó.
Con voz entrecortada, dijo sentirse impotente, porque no es el único caso, hay otros tres de sus compañeros, uno tuvo que aceptar esta medida porque está postrado en cama, pero él, ante la precaria situación que está enfrentando, decidirá llegar a las últimas consecuencias legales, pues no tiene ni para comer y cuando pidió dinero a Víctor Hernández Colunga, secretario general de la Sección 47, lejos de ver lo de su jubilación, le mandó dos mil pesos.
“Voy a presentar una demanda, porque he quedado desamparado, si llego a morir seré enterrado si mi esposa tiene, de lo contrario seré enviado a la fosa común, es una falta de respeto a quienes hemos dado toda una vida para la industria petrolera y para el STPRM, pero además que a los líderes no se les olvide que si ellos están ahí, es por las cuotas sindicales, siempre fui fiel a mi sindicato, pero me están dejando morir solo y a la bendición, ahora dicen que se mueven, pero como, mal, en mi perjuicio”, concluyó.