El presidente de Estados Unidos, Donald Trump faltó el respeto a México desde el momento en el que impuso medidas arancelarias, además de que, desde la visión política, ejerce presiones adicionales en materia de seguridad y migración, los cuales usó como condicionantes, por lo que, si la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, responde con acciones en el ámbito comercial, el sector empresarial ratifica su compromiso en respaldar toda aquella acción en defensa del comercio libre y equitativo, es así como la postura deberá ser firme con la finalidad de impugnar esta medida arbitraria, señaló, el presidente del Centro Empresarial de la COPARMEX en Ciudad del Carmen, José Alejandro Fuentes Alvarado.
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Luego de que, el pasado cuatro de marzo, el gobierno de Estados Unidos impusiera aranceles del 25 por ciento a los productos mexicanos y canadienses, junto con la aplicación de medidas recíprocas a productos agrícolas a partir del dos de abril, el entrevistado refirió que, sin duda, el actuar del presidente norteamericano, genera incertidumbre en las cadenas de suministro, por lo que, en la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), reconocen que su impacto podría ser además de negativo, significativo.
“A nivel nacional e internacional, expertos vislumbran que de no atenderse adecuadamente, la aplicación de estos aranceles podría llevar a México a una recesión, mientras que el tipo de cambio podría superar los 22 pesos por dólar, incrementando costos para las empresas y afectando el poder adquisitivo de las familias, reconocemos que la presidenta ha realizado esfuerzos para mantener un diálogo constructivo con su contraparte estadounidense, pero la imposición final de estas medidas evidencia una falta de compromiso con la cooperación y el respeto a los acuerdos comerciales por parte del gobierno de Estados Unidos”, sostuvo.
Para Fuentes Alvarado, en lo regional y local, la industria petrolera en estos momentos enfrenta complicaciones de las cuales seguramente saldrá, pues la presidenta Claudia Sheinbaum tiene compromiso de solucionarlo, sin embargo, cualquier decisión con respecto al tema arancelario, tendrá que ser con base en un análisis riguroso, evitando daños colaterales a la industria y a los consumidores de los tres países.
Señaló que a nivel central, la COPARMEX ha estado muy al pendiente de como se han generado estas condiciones puesto que es un tema de suma importancia, pero además, porque no se puede negar que la estabilidad de la relación económica con nuestros principales socios comerciales como lo son estadounidenses debe ser una prioridad, pero siempre bajo condiciones justas y recíprocas, algo que para nada se ha dado con Donald Trump.
Por último, dijo que seguramente la presidenta Sheinbaum mantendrá esa postura firme que ha caracterizado a su gobierno, pero además, basarse en lo que establece el tratado de libre comercio para dar revés a la medida arancelaria que es arbitraria. Mientras que, el Gobierno ha de estar pensando ya en la diversificación de mercados y reducir la dependencia de un solo país, con estrategias que fomenten la competitividad y el crecimiento de las empresas mexicanas en los mercados internacionales.