El presidente municipal del Partido Acción Nacional (PAN) en Calkiní, Marcial Augusto Farfán Ojeda denunció la presunta detención arbitraria de su vehículo en el operativo de alcoholimetría que se efectuó sobre la avenida Luis Donaldo Colosio Murrieta; donde a pesar de resultar negativa la prueba de alcoholímetro le retuvieron su vehículo con base en el artículo 72 del reglamento de tránsito para el estado de Campeche.
Durante la tarde de ayer, Farfán Ojeda conducía un automóvil Vento negro, con placas del estado de Campeche, cuando al atravesar el operativo que implementó la Dirección de Vialidad lo eligieron aleatoriamente, para practicarle la prueba de alcoholimetría, la cual accedió confiado, ya que según en entrevista a este rotativo, tiene 30 años sin probar bebidas alcohólicas.
Tenía botellas abiertas
Luego de arrojar negativo en la prueba pensó que los uniformados le permitirían continuar su camino de regreso a la ciudad de Calkiní, pero encontraron en el interior de la unidad cervezas abiertas, por lo que procedieron a retenerle la unidad con base al artículo 72 del reglamento de la Ley de Vialidad, Tránsito y Control Vehicular del estado de Campeche, que impide el consumo de bebidas embriagantes en el vehículo.
Por lo anterior, los uniformados lo infraccionaron y le informaron que le retendrían el vehículo para trasladarlo a un corralón hasta que pudiera realizar el pago del folio, por lo cual el dirigente municipal blanquiazul en negativa al hecho afirmó que procedían de manera ilegal, ya que no estaba ingiriendo bebidas embriagantes, mencionó que es el titular de un centro de rehabilitación para personas con alcoholismo.
En un principio el afectado no descendió de su vehículo, tampoco permitía que se usara una grúa para transportarlo pues aseguró que se encontraba en óptimas condiciones para manejar hasta la Atenas del Camino Real.
Ofreció un trato
Después de unos momentos le dio la opción a los elementos de que fuera uno dentro de su unidad a las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), pero ante la insistencia de los uniformados accedió a bajarse de la unidad y aceptar la situación.
Cabe destacar, que derivado de la pandemia del COVID-19, no está en funcionamiento el denominado “torito” y los conductores sólo deben pagar la multa por conducir bajos los efectos del alcohol.
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GH